El 9 de noviembre de 2011 se vivió uno de los capítulos más complejos que ha enfrentado la selección chilena en el último tiempo. Aquel día ocurrió el denominado "bautizazo", en el que estuvieron involucrados Jorge Valdivia, Gonzalo Jara, Jean Beausejour, Carlos Carmona y Arturo Vidal, quienes, tras ser desafectados de la concentración antes de enfrentar a Uruguay en Montevideo, fueron castigados con 10 partidos de suspensión.

Producto de la indisciplina que cometieron los seis jugadores, se vivió un duro cara a cara en Juan Pinto Durán cuando el capitán Claudio Bravo, Gary Medel, Alexis Sánchez y Humberto Suazo encararon a los involucrados.

En ese momento, "Chupete" fustigó a los implicados, diciéndoles que con dicha actitud perjudicaban a la Selección y que el resto del plantel hacía un esfuerzo dejando a sus familias para venir a jugar por Chile, y que ellos no consideraban el sacrificio del resto de sus compañeros.

Tras ese episodio, el sanantonino continuó en la Selección, principalmente por el compromiso que tenía con el cuerpo técnico de Claudio Borghi, mientras los sancionados aguardaban cumplir sus fechas de castigo para retornar a las convocatorias. Así, por diversos motivos y por la renuncia del propio atacante al combinado nacional, el "Chupete" no volvió a coincidir en la "Roja" con todos los protagonistas del "bautizazo".

Después de la salida de Borghi, Suazo dio un paso al costado, mientras el presidente de la ANFP, Sergio Jadue, le encomendaba al entrante seleccionador Jorge Sampaoli recomponer el camarín. El casildense propició, primero, los retornos de Vidal, Jara y Beausejour y luego los de Valdivia y Carmona, quienes eran los únicos ausentes de las nóminas chilenas tras el "bautizazo".

El casildense también nominó a Jhonny Herrera, quien era resistido por Borghi, y de quien se decía no podía convivir con Bravo, lo que fue desestimado por Sampaoli.

Y en la tarea de recomponer el vestuario, el ex estratego de Universidad de Chile logró convencer a David Pizarro para que volviera a jugar por la Selección después de ocho años y tras conversar con Charles Aránguiz, lo volvió a reintegrar al equipo, luego de que no se presentara en la concentración para enfrentar a Brasil en un amistoso

Con el retorno de "Chupete", el DT consigue otra variante en ofensiva, sobre todo en un puesto donde no había un jugador indiscutible. En los últimos tres partidos clasificatorios, el titular había sido Esteban Paredes, pero su actual nivel no satisface al casildense.

Con la presencia del sanantonino en la convocatoria, es un hecho que comandará el ataque nacional ante Venezuela, en un tridente ofensivo que completarían Alexis Sánchez y Eduardo Vargas, si es que se logra recuperar de una lesión muscular, de lo contrario jugaría Jean Beausejour.