Lugar de vacaciones favorito de la realeza y el jet set europeo, la ciudad de Niza es conocida como la joya de la Costa Azul, por su cultura y exquisita arquitectura.

La belleza de sus calles y la exclusividad de sus visitantes hizo que Citroën la eligiera para presentar al último integrante de su lujosa línea DS, el DS5, que llega a coronar el nuevo estilo de hacer vehículos que la marca inició con los DS3 y DS4, y que busca satisfacer a clientes que persiguen mayor estilo y refinamiento, pero sin pagar un gran precio.

Al contrario de lo ocurrido con los otros modelos DS, el tercer vehículo de su división fue creado desde cero y no busca imitar los códigos de los constructores premium. Lo que quiso Citroën fue reinventar el enfoque y estética del segmento, para dar origen a un auto único, elegante, y que rompe todos los esquemas.

Esto último se puede ver en su forma, una mezcla entre berlina, grand tourer y coupé, que le brindan lo mejor de estos mundos: un diseño elegante y refinado, un amplio habitáculo y buen espacio de carga, y una excelente performance en carretera.

Por fuera es mucho más agresivo que los otros modelos de la línea, principalmente por las entradas de aire a la altura de los neblineros, aunque suma puntos en elegancia gracias a diversas aplicaciones cromadas sobre los faros delanteros, parachoques y puertas, y al uso de policarbonato a la altura de la luneta trasera, para mantener la línea oscurecida de las ventanas y pilares.

Aunque comparte plataforma con el C4 Picasso, sus dimensiones son completamente distintas. Mide 4.530 mm de largo, 1.850 mm de ancho, 1.508 mm de altura y tiene 2.727 mm entre ejes, permitiendo un gran espacio interior y gran comodidad en las plazas traseras, a pesar de que el pilar C está bastante inclinado.

Por dentro se notan las aspiraciones de lujo de la marca, con materiales que no se habían visto en otros modelos. Así, hay distintas combinaciones de cuero para el tapiz, además de opciones para las aplicaciones metálicas, que dan como resultado un ambiente de extrema calidad.

Esto, unido a una posición de manejo deportiva y al diseño interior inspirado en la aeronáutica, con mandos en el techo, consola envolvente, head-up display a color, volante con la parte baja plana y relojes semi digitales, hacen que el DS5 ostente el mejor diseño de la gama.

En cuanto a las motorizaciones, Citroën desarrolló cinco opciones pensando en los diversos mercados. Cuentan con dos motores diésel, un 1.6 e-HDI de 110 Hp y un 2.0 HDI de 160 Hp, y dos bencineros de 1.6 con turbocompresor, uno de 155 y otro con 200 Hp, todos ellos asociados a cajas mecánica y automática de seis velocidades.

La quinta opción es a la vez la primera versión híbrida de Citroën. El DS5 Hybrid4 utiliza el mismo sistema visto en Peugeot, y que está compuesto por un motor diésel de 163 Hp, que se encarga dar motricidad a las ruedas delanteras, y otro eléctrico de 37 Hp, que manda el par a las traseras.

Esta variante, además, cuenta con un selector de cuatro modos de conducción: Auto, Sport, 4WD y ZEV, que se utiliza para conseguir un manejo urbano sin emisiones, apoyado ciento por ciento en el motor eléctrico.

De acuerdo a Marco Zúñiga, gerente de marketing de Citroën Chile, el DS5 debería arribar al país a principios del segundo semestre de 2012, con las motorizaciones más potentes y la versión híbrida, aunque todavía no se puede estimar un precio base, que no será bajo por su nivel de lujo.