Bajo la protección del dios egipcio Horus, cuyos ojos están estampados en las laterales de cada una de las 60 embarcaciones que componen esta travesía, se dio la largada oficial de la 13ª versión de la Regata VTR Chiloé 2012, uno de los más importantes eventos del velerismo chileno y que es una de las etapas del Campeonato Nacional Oceánico.

A bordo del buque de la Armada Almirante Merino, el comandante en jefe de la Armada, Edmundo González, fue recibido por distintas autoridades navales y deportivas para presenciar el tradicional desfile de los yates competidores.

También participaron de esta ceremonia lanchas chilotas y otras embarcaciones de la zona, para embellecer aún más el panorama de la bahía de Puerto Montt, de donde también se dio la largada oficial de la regata.

Con un mar tranquilo y poco viento, esta primera etapa tuvo el objetivo de conectar Puerto Montt con los místicos parajes de Calbuco, llevando a los competidores a atravesar el estrecho de la costanera, con salida desde el Club Náutico Reloncaví, ubicado a escasos minutos de la bahía.

El gran destaque de la jornada fue la embarcación Pisco Sour, de Eduardo Matte, que se ubica en el primer lugar de la clase Soto 40. De la mano de Pablo Amunátegui, los navegantes se situaron en el primer puesto en el reencuentro del "Gato" con el mar de Chiloé.

"Fue difícil. Partimos mal ubicados en el camino a Calbuco, pero fuimos repuntando. Estoy sumamente feliz. Estas aguas nunca me han abandonado. Lo estamos logrando y lucharemos para que podamos seguir en esta senda", declaró.

Por su parte, Entel, comandado por Per von Appen, debió enfrentar una difícil situación, ya que en el trayecto de Puerto Montt a Calbuco una roca dañó partes del yate, lo que los obligó a abandonar la etapa, relegándolos a la décima posición de la general.

En esta segunda parte, venció VTR-Corpbanca, comandado por Miguel Corti.

Hoy, se disputará la prueba que conecta Calbuco con Quemchi, a partir de las 10.00.