El mensajero de los témpanos

Ha llegado a navegar, en una temporada, un total de 27.000 millas, equivalentes a recorrer por mar desde Punta Arenas a Tokio, pasando por Auckland, San Diego y retornando a Punta Arenas. Es el rompehielos Óscar Viel, de la Armada de Chile (en la imagen al fondo), que es usado como plataforma para numerosos proyectos científicos. La nave cumple una labor fundamental para alcanzar puntos remotos, en especial considerando que gran parte de la investigación polar nacional se realiza en diversas áreas de la península Antártica, muchas de ellas ubicadas lejos de bases y refugios y a las cuales solo es posible acceder por vía marítima.

Aurora austral en el Polo Sur

Esta imagen de una colorida aurora austral fue captada el pasado 15 de julio cerca de la estación MacMurdo, una de las bases de Estados Unidos en el continente blanco. Es la contraparte de las luminosas auroras boreales del Polo Norte. El fenómeno se presenta en ambos polos y ocurre cuando partículas cargadas de protones y electrones que emanan del sol, llegan a la Tierra y se estrellan con el campo magnético de nuestro planeta, dando origen a espectáculos visuales como el que apreciamos en la imagen.

Elefantes del mar

El elefante marino lleva ese nombre no solo por su enorme tamaño, sino por la presencia en los machos adultos de una especie de trompa, que usan para hacer un fuerte rugido, especialmente durante la época de reproducción. Los machos adultos pueden llegar a medir más de 6 m de largo y alcanzar un peso que oscila entre los 2.200 y 4.000 kg, en tanto que la hembra, como la de la imagen, es bastante más pequeña, alcanzando los 4 m y pesando entre 700 y 1.000 kg.

Telescopio bajo el hielo

El telescopio de neutrinos IceCube (Cubo de hielo) forma parte de la estación estadounidense Amundsen-Scott y está enterrado a dos kilómetros bajo el hielo. Se trata de un detector de partículas subatómicas que busca los residuos resultantes de violentas colisiones espaciales, como las explosiones de supernovas. Se lo considera el más grande en su tipo y entre sus tareas se encuentra la búsqueda de la elusiva materia oscura que, en teoría, puebla la mayor parte del universo.

La marcha de los pingüinos

Durante 20 años el científico Paul Ponganis ha estado estudiando las colonias de pingüinos emperador que habitan el área del Mar de Ross, analizando su fisiología y comportamiento. Entre sus hallazgos se cuenta el hecho de que son capaces de sumergirse a profundidades de hasta 500 metros en menos de 12 minutos. Llegó a registrar un episodio en el cual un pingüino emperador llegó a permanecer un récord de 27 minutos suemergido en el agua.

Caracoles de las corrientes marinas

Esta imagen captada en Bahía Fildes muestra al Limacina Antartica, un diminuto caracol que vive en el océano austral. A diferencia de otros caracoles marinos, que viven asociados a fondos rocosos o algas, vive flotando en la columna de agua y se desplaza a diferentes lugares usando las corrientes marinas. El proyecto Georreferenciación submarina, del doctor Dirck Schories y financiado por el Instituto Antártico Chileno, estudia la biodiversidad en esta zona mediante el uso de herramientas como el GPS.

Gigantes que se desprenden

El sector de península Antártica se está calentando por sobre el promedio global debido al cambio climático, siendo considerado clave en estudios científicos para entender como afecta este fenómeno a nuestro planeta. Un proyecto del glaciólogo del Centro de Estudios Científicos de Valdivia, Gino Casassa, examina el estado y estabilidad de la plataforma Larsen C, ubicada en la parte noreste del Mar de Weddell, que ha sufrido gigantescos colapsos desde 1995 en sus secciones A y B.

Milenarios lagos enterrados

Enterrados bajo el hielo existen más de 140 lagos subglaciares. El campamento de investigación ruso Vostok fue inaugurado en 1957 para estudiar el lago del mismo nombre, que ha permanecido aislado por 20 millones de años. Mide 250 km de largo por 50 km de ancho y está enterrado a más de 3 kilómetros bajo la superficie. En febrero pasado los científicos consiguieron llegar hasta el lago con sus excavaciones de profundidad, un hito que podría revelar formas de vida desconocidas que evolucionaron en completo aislamiento.