"El se levanta, me mueve y me dice: '¡Despierta, corre!'. Abro la puerta y veo las llamas".
Norma es la hermana de Héctor Gutiérrez Soto (77), el ex dueño de la tradicional fábrica de cecinas La Chilenita, que murió ayer por asfixia al incendiarse su casa en Gaspar de Orense, comuna de Quinta Normal.
Las llamas se iniciaron a las 3.43 y consumieron totalmente el inmueble.
Bomberos investiga las causas. Una de las hipotesis apunta al recalentamiento de una estufa.
"A veces llegaba diciendo que su hermano quería bailar", dice una vecina, que recuerda como "muy buena persona" al fallecido, que sufría de alzheimer.
"A los 14 años, Héctor salía en el camión con su padre (Luis Gutiérrez) a comprar cerdo a Talagante o al matadero de Quinta Normal. Después, faenado, lo empezaban a procesar a la chilena, aliñado y sabroso", recuerda Rodolfo Lobos (76), que conoció a quien fue su jefe en el año 54.
"Durante la década de los 60 toma control de la empresa don Héctor Gutiérrez Soto (...). En esta etapa, que llega a cerrar el siglo XX, la empresa alcanza un importante crecimiento, el que termina con una crisis financiera y de gestión, que la lleva al borde del cierre", se leía ayer en la página www.cecinaslachilenita.cl.
Algunos familiares atribuyen el fin de la "época dorada" a la proliferación de supermercados en los barrios; otros, a una "mala gestión" en la fábrica.