Los santiaguinos llevan más de dos años extrañando uno de los atractivos íconos de la ciudad: el teleférico del cerro San Cristóbal. Este dejó de funcionar en junio de 2009, tras un desperfecto en el sistema de velocidad, y podría estar operativo nuevamente en septiembre de 2012.

Sin embargo, y para acortar la espera, los habitantes de Santiago tendrán una nueva atracción para sacar provecho del Parque Metropolitano: un segundo funicular con entrada por Av. Perú. Se trata del ascensor que será uno de los elementos principales del Parque de la Infancia, una nueva área verde ubicada en la ladera poniente del cerro San Cristóbal y que está orientada completamente a los niños.

El ascensor ya está listo y desde la semana pasada comenzó su etapa de marcha blanca. Tiene capacidad para 12 personas y permitirá a los visitantes subir por la ladera desde un par de metros sobre el nivel de la calle hasta el sector de los toboganes, que está 40 metros más arriba.

Pese a que el funicular ya está terminado, recién estará disponible para el público la segunda quincena de enero próximo, cuando se inaugure el espacio recreacional. "Es una buena fecha para aprovechar la temporada estival", asegura el director del Parque Metropolitano, Bernardo Küpfer.

Plaza de agua

Los principales atractivos del lugar ya están listos. Uno de los más llamativos es la reja tridimensional, que consiste en una estructura metálica, de color naranja, que podrá ser utilizada como juego infantil. "La gracia es que los niños se pueden meter en la reja e ir recorriendo el interior, a través de los 310 metros que tiene", explica Küpfer. La reja ya está terminada y lo único que le falta es la instalación del inmobiliario que tendrá adentro, como unos megáfonos con los que los niños se podrán comunicar de un lado a otro.

El sector de los juegos de agua también está listo. Lo componen decenas de esferas de diferente tamaño, que están construidas de hormigón y que lanzan agua que recircula. "Aquí los niños podrán refrescarse en verano, mientras sus padres leen el diario en un asiento o disfrutan de alguna bebida en la cafetería", cuenta Küpfer.

Alrededor de la plaza de agua hay abundante vegetación y colinda con un antiguo molino que se mantuvo intacto y que será utilizado para guardar las herramientas de jardinería. En esta zona, también se ubican alrededor de 50 pintorescas casas-árboles.

El anfiteatro, que será utilizado para charlas educativas, tiene su obra gruesa finalizada y sólo falta que se construyan sus graderías y el acceso para sillas de rueda. Además, está lista la estructura de metal circular que contendrá 30 columpios. "La cafetería también tiene su obra gruesa terminada y estamos preparando la licitación de su administración", agrega el director del Parque Metropolitano.

Parque de toboganes

Una de las zonas más importantes del recinto será la de los toboganes. Serán en total cerca de 70 de estas entretenciones, que están hechas de hormigón y cuyo diseño tiene una geometría que evitará que los niños se deslicen a gran velocidad. "Nos preocupamos de que el diseño fuera seguro", afirma Küpfer. Los toboganes se instalan en una zona compuesta por 12 terrazas, que permitirán a los pequeños deslizarse hasta el área baja del parque.

Una vez que finalice la instalación, se complementará con barandas y pasamanos. Estos juegos están rodeados por 250 almendros, los que ya fueron plantados.

Cuando esté operativo, el Parque de la Infancia podrá albergar en forma simultánea a 2.500 visitantes en sus cuatro hectáreas. La idea es que una familia pueda recorrer todas sus atracciones en cerca de tres horas.

Tendrá tres accesos: uno que lo conectará con el ingreso por Pío Nono y los dos restantes serán por Av. Perú, en Delfina León y Santos Dumont. Este último estará conectado con la estación de Metro Cerro Blanco, a través de un sendero de pastelones con flechas que señalarán el acceso al parque.

"Con este proyecto cumplimos el antiguo anhelo de contar con un acceso directo al Parque Metropolitano desde Recoleta", afirma la alcaldesa de esa comuna, Sol Letelier.

"Este parque permitirá a los niños recrearse en un ambiente innovador y donde harán volar su imaginación", remata el ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez Mackenna.