Fue la semana pasada cuando la justicia dictaminó que las siete expulsadas del Liceo Tajamar debían ser reingresadas al establecimiento.

Tres de ellas, Carolina Lagos, Fernanda Méndez y Millaray Solano llegaron ayer en la mañana hasta el establecimiento, donde dejaron una carta.

Si bien señalaron que se sienten contentas por la decisión de los tribunales, dijeron que no podrán ingresar al liceo hasta que termine el primer semestre, ya que las tres habían decidido continuar con los estudios en otros recintos educacionales, mientras esperaban la determinación de la justicia.

Las alumnas fueron expulsadas del liceo en enero pasado, por haber participado en las movilizaciones estudiantiles. "Tenemos el gusto de haber sido reconocidos en nuestro derecho", dijo Leonardo Pérez, uno de los apoderados del colegio.

En tanto, para Dafne Concha, presidenta de la Coordinadora de Padres y Apoderados por el derecho a la educación, las decisiones de la justicia "son derrotas que las directoras (de los colegios) deberían asumir".