Fue una fiesta de principio a fin en la precordillera de La Reina. Bombos, banderas y hasta bengalas hubo en el Parque Mahuida, donde la Ley de Violencia en los Estados resuena como un eco de otros deportes. En ese ambiente, como merece un clásico, el quince de Old Boys se impuso por 28-21 ante Cobs, en la final del Ado Súper 12 de Rugby.

Las más de dos mil personas que repletaron el CARR presenciaron un juego cerrado, con muchos rucks y mauls, aunque en más de una ocasión el asunto cambiaba de canal y terminaba en algún try.

Así, se planteó la historia casi desde un comienzo y los ex Craighouse ya se imponían por 8-0 a los cincos minutos. La remontada de los albinegros vino casi de inmediato, pero siempre tuvo que luchar contra la eficacia de Timothy Gibson, tanto en las patadas tácticas como aquellas a los palos, aunque en el mismo acápite, los ex alumnos de The Grange contaban con Juan José Ruiz.

Por eso, el asunto terminó 17-15 a favor de Old Boys al concluir la primera etapa.

Quizás por el cansancio o por el desgaste del esfuerzo, ambas escuadras cometieron muchos penales, lo que atentó contra el juego a la mano o un mayor despliegue para llegar hasta los wings.

Sin embargo, el conjunto de La Reina tenía cuentas por cobrar ante su par de La Dehesa, pues este se había impuesto por 21-13 en la final del torneo Arusa. En este contexto, Old Boys aportó el mayor grado de presión en el segundo y se vengó como corresponde, con una victoria y una corona: 28-21 y un título que fue celebrado a todo lo alto, como lo explicó el octavo Alejandro Tocigl: "Todo esto es un regalo merecido. Durante el torneo fuimos un poco irregulares, pero siempre estuvimos unidos. Ganar esta final es lo máximo y no se puede pedir nada más. El triunfo se basó en que nunca bajamos los brazos; fue un premio a la constancia", señaló.

El capitán Cristóbal Westenenk coincidió en algunos conceptos: "Fue un juego muy duro y podría haberlo ganado cualquiera, pero nos afirmamos bien en el segundo tiempo. Por suerte no se repitió la final de la Arusa y estamos felices por lograr este campeonato", dijo.

En Cobs, en tanto, el capitán Ignacio Alvarez lamentó la derrota sufrida ante el archirrival: "Tuvimos fallas que en una final te cuestan caro. Siempre duele perder una final, pero ante el rival clásico deja un sabor aún más amargo".