El cineasta español Julio Medem es médico de profesión y, quizá por ello, no vacila en mostrar con precisón clínica los desnudos corporales y síquicos de sus atormentados personajes. Sus temáticas siempre nadan en el mar de los afectos trágicos (Los amantes del círculo polar, 1998) y su estilo se concentra cada vez más en planos de abierta sensualidad (Lucía y el sexo). Tampoco es ajeno a la polémica: hace siete años, su documental La pelota vasca fue acusado de simpatizar con la ETA. Ahora, en pleno 2010, arriba a las pantallas españolas Habitación en Roma, la película más erótica de su carrera.

Según él, se trata de "la cinta más difícil de mi vida". Es una versión muy libre de En la cama, dirigida por el chileno Matías Bize en 2005. ¿Por qué libre? En primer término, porque Medem estiró la cuerda del remake al punto de cambiar el sexo de uno de los personajes: los amantes ya no son Daniela y Bruno (Blanca Lewin y Gonzalo Valenzuela, en la cinta original), sino que Alba (Elena Anaya) y Natasha (Natasha Yarovenko). En segundo lugar, las mujeres son de diferentes nacionalidades (española y rusa). En tercer término, Medem privilegia mucho más que Bize las escenas de sexo, una constante que su cine viene explotando por lo menos desde la mencionada Lucía y el sexo (2001).

Al presentar el filme la semana pasada, en el Festival de Málaga, Medem (de 51 años) se mostró algo contrariado ante los requerimientos por el contenido erótico del largometraje. "Estoy un poco harto de que algunos reduzcan mi obra sólo a sexo", sostuvo quien es uno de los nombres establecidos del cine hispano de los últimos 20 años, con cinco Goyas y un premio en Cannes por La ardilla roja, el año 1993.

Las expectativas para su último trabajo son altas (en Málaga hubo aplausos en la función) y el propio Bize se declara un admirador de Medem. "No he visto la película, pero para mí es un honor que alguien como él haga un remake de En la cama. Tiene un estilo muy definido y eso se ve en La ardilla roja, Los amantes del círculo polar y Lucía y el sexo, obras que me gustan. Lo interesante es que no se quedó con la historia original, sino que hizo su propia versión", dice Bize acerca del filme que se estrena mañana en España.

El español, por otra parte, es fan de En la cama. "La película de Matías Bize me gustó muchísimo. Esta historia de dos personas que se gustan y se conocen por primera vez me enganchó", dice Medem a La Tercera. "Escribí el guión y la idea era contar una historia de deseo y amor entre dos mujeres distintas. Al principio no quieren enamorarse, porque tienen muchas trancas que superar, pero al final encuentran algo", agrega.

En la versión nueva, la española Alba es pequeña, morena y lesbiana, mientras que la rusa Natasha es alta, rubia y heterosexual.

Aunque Medem ha defendido el trasfondo romántico de la película (que era dominante en la versión de Bize), los afiches promocionales, los trailers y las imágenes dan cuenta de una producción donde el erotismo es protagonista. Durante el 90 por ciento de la película (que dura 110 minutos), ambas actrices aparecen desnudas, cuestión que a la hora del rodaje provocó bastante desgaste. "Fue muy difícil grabar así todo el tiempo. La escenas terminaron siendo un cóctel molotov de emociones", explica la actriz Elena Anaya.