La organización terrorista vasca Euskadi Ta Akabatasuna (ETA) -Patria Vasca y Libertad- no dejó que los 50 años de su fundación, cumplidos ayer, pasaran desapercibidos. Con menos de 48 horas de diferencia cometió dos atentados -en Burgos y Mallorca-, en un intento por demostrar que aún está viva, pese a los duros golpes que ha recibido en los últimos 10 años, con la captura de varios de sus líderes en España y el sur de Francia. Así, mientras otros grupos terroristas europeos como las Brigadas Rojas, en Italia, o el IRA en Irlanda del Norte han desaparecido, ETA sigue operando.

Ayer, España amaneció en alerta máxima por temor a nuevos atentados. A la fecha, ETA es responsable de la muerte de más de 825 personas desde fines de los 60 en su campaña por lograr que el País Vasco sea independiente de España. Con decenas de policías en las calles, el Ministerio del Interior difundió las fotos de seis presuntos activistas involucrados, tanto en el atentado del miércoles -que destrozó una residencia de la Guardia Civil en Burgos-, como de la bomba que el jueves mató a dos agentes policiales en Palma de Mallorca.

Si bien las autoridades hispanas han asegurado que continuarán vigilando de cerca las actividades del grupo separatista, el declive de la organización es un hecho. Así lo demuestran las estadísticas de los incidentes protagonizados por ETA durante los últimos 30 años. De hecho, el peak de los atentados se produjo en la década del 80, donde se registraron más de 900 incidentes atribuidos al grupo.

Precisamente, en ese período se registraron los atentados más sangrientos. Uno de los más recordados fue un cochebomba que estalló frente al centro comercial Hipercor, en Barcelona, en junio de 1987. En el lugar murieron 21 personas y otras 45 resultaron heridas.

Otro de los capítulos más recordados y repudiados de la organización fue el secuestro del concejal Miguel Angel Blanco, el 10 de julio de 1997. A cambio de su liberación, ETA exigió al gobierno el traslado de varios de sus miembros a prisiones del País Vasco en un plazo no mayor a 48 horas. Sin embargo, poco después del plagio, miles de personas salieron a las calles en Madrid y otras grandes ciudades españolas a exigir a ETA su liberación. Las manifestaciones se repitieron por dos días, hasta que Blanco apareció herido con dos disparos de bala que le terminaron causando la muerte el 13 de julio de 1997. El hecho marcó un hito que influyó en el debilitamiento del grupo.

Origen

ETA fue fundado en 1959, durante el régimen de Francisco Franco, por un grupo de estudiantes que fijaron como principios rectores: defender el idioma y la etnia vascos, el sentimiento antiespañol y sobre todo, la reivindicación de los territorios del País Vasco. Sin embargo, sus objetivos y métodos han perdido apoyo entre los vascos.

Ayer, uno de los fundadores de ETA, Julen Madariaga, rechazó los últimos atentados. "Desapruebo totalmente lo de Burgos y lo de Palma", señaló.