¿QUE GARANTIZA calidad: la acreditación o un examen único habilitante rendido por todos los egresados de una carrera universitaria? La respuesta del Ministerio de Salud (Minsal) al eliminar el Examen Unico Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom) es inequívoca: la acreditación. De esta manera se desalinea del modelo sustentado por el gobierno, en el sentido de instalar exámenes habilitantes en profesiones críticas (Medicina, Pedagogía, etc.), y de la evidencia de los hechos: la profunda crisis que vive el sistema de acreditación nacional.
Para garantizar la salud de los chilenos es fundamental que exista un examen habilitante para los médicos recién egresados. ¿Por qué no basta con la acreditación? Primero, porque ésta mide procesos y no resultados; y, segundo, evalúa instituciones como universidades o carreras, pero no personas. Es decir, la acreditación nos debiese asegurar que los procesos de una determinada institución son de calidad, pero nunca ha garantizado que los egresados de dicha entidad cumplan con estándares de excelencia.
Ese es un error del Ministerio de Salud, pero lo más grave es que habilita a ejercer a los egresados del 99% de las escuelas de Medicina (porque sólo una no está acreditada). Títulos falsos, acreditaciones fraudulentas, tráfico de influencias; ¿podemos confiar en la acreditación de todas las escuelas de Medicina? Claramente no; la idea del Minsal es inoportuna y riesgosa.
Exigimos que el país tenga un examen habilitante en Medicina: el Estado debe garantizar que cada médico recién egresado -individualizado con nombre y RUT- y que tiene permiso para ejercer la profesión posee las competencias necesarias para hacerlo.
Examen habilitante y acreditación (de calidad) son complementarios. Proponemos que el Eunacom se establezca para el sector público como para el privado, porque se debe resguardar la salud de toda la población y no sólo de quienes se atienden en el sistema público. Asimismo, debe estar en manos del Estado o de una agencia autónoma, cuyos directivos deben ser elegidos vía Alta Dirección Pública, a fin de que el instrumento pueda entregar la máxima seguridad, calidad y confiabilidad. Además, la herramienta debe ser sometida periódicamente a una evaluación internacional.
El Eunacom debe ser estrictamente habilitante, evitando que se convierta en un fin en sí mismo e instrumento comercial de algunas universidades. Las facultades de Medicina debemos formar excelentes médicos y no enfocarnos en educar profesionales que saben rendir bien un examen, pues hay una gran brecha en calidad entre un concepto y otro. Por ello hay que establecer sanciones legales para las instituciones que utilicen el Eunacom dentro de su estrategia publicitaria.
Durante meses, el Ministerio de Salud, las facultades de Medicina, el Colegio Médico y los estudiantes trabajamos en una mesa que alcanzó muchos acuerdos para mejorar este test. En vez de asumir este desafío, el Minsal propone un proyecto que nos deja sin filtros de calidad en una materia altamente sensible, por lo que llamamos a los parlamentarios a no aprobar el proyecto y a optar por los cambios fundamentales para resguardar la salud de la población.
Cecilia Sepúlveda
Decana Facultad de Medicina Universidad de Chile