Una estruendosa guerra de gritos entre concejales oficialistas y aliancistas se desencadenó ayer, en la sala de plenarios del Hotel Enjoy de Coquimbo, cuando Sebastián Piñera subió al estrado del II Congreso Nacional de Concejales, pasadas las 13.30.
"Presidente" o "ladrón", vociferaban los representantes edilicios según su tendencia.
Los dirigentes de la Concertación dicen que los ánimos se encendieron por el atraso del abanderado RN en subir al estrado, en un acto que estaba programado para las 11.30. Agregan que Piñera no quiso sentarse junto a los otros candidatos presidenciales, quienes según el PPD, fueron calificados por el entorno del presidenciable como "picantes del 1%".
Efectivamente, el abanderado de la Alianza recién subió al escenario cuando Jorge Arrate y Adolfo Zaldívar -quienes ya habían partido con una hora de retraso- abandonaron el escenario.
"Ellos querían presentar el acto como un foro presidencial, pero a mí me habían invitado a una presentación", dice Piñera al respecto.
Cuando él intentó comenzar a hablar, el griterío
en el lugar lo impidió por al menos 10 minutos. Después de ese lapso, en que también hubo empujones
y golpes, los concejales concertacionistas se fueron con sus pancartas al hall central, pero sus gritos seguían dificultando la exposición del candidato RN.
Fue en ese momento que la senadora Evelyn Matthei, escoltada por un numeroso grupo de aliancistas, salió a encararlos y se enfrentó a gritos con los dirigentes que, en ese momento, vociferaban por Eduardo Frei.
"Me paré y fui a cerrar la puerta. Ellos no querían que la cerrara porque querían mocha", afirma la senadora. Es en ese momento, entre insultos y patadas de ambos bandos, se produjo un confuso incidente entre la parlamentaria y el concejal DC por Hualqui, Sergio Fuentes. Las imágenes de televisión muestran a ambos discutiendo
y a la senadora colocando una mano en el rostro del falangista, cuyos anteojos se bambolean.
Fuentes dice que ella intentó botarle los lentes y que en el intento, lo rasguñó. "También me empujó contra una muralla y me pegó una cachetada", agrega el edil, aunque esto último no queda claro en las imágenes.
Matthei, sin embargo, desmiente el hecho. "Él no me dejaba cerrar la puerta y yo le toqué la cara con la mano izquierda para que reaccionara. Pero no le di una cachetada", dice Matthei.
"Tengo 50 testigos de que eso es falso, que es la actitud típica de estos cobardes que primero arman disturbios y después van a quejarse como niñitas regalonas", agrega.
Matthei dijo ayer que si Fuentes insiste con su versión, recurrirá a tribunales por calumnias. Fuentes también dice que recurrirá a la Justicia, pero por agresión.