Fallas en su equipo de distribución de oxígeno habrían sido las causas que explicarían la muerte de un experimentado instructor de buceo de la caleta Los Molles de la comuna de La Ligua.

El accidente se produjo la tarde de ayer, cuando Rodrigo Fuenzalida (44) dirigía un curso de buceo a ocho alumnos de su empresa Cabosud, a 150 metros de la orilla de la playa. Tras las fallas, fueron sus propios alumnos quienes lo sacaron a la superficie y pese a los esfuerzos por reanimarlo, finalmente Fuenzalida falleció.

El capitán de puerto de Quintero, Javier Vásquez, dijo que el instructor "salió de la superficie inconsciente, aparentemente por problemas en su equipo, se le realizó de inmediato reanimación para recuperarlo, pero después de media hora no dio resultado".

Fuenzalida era reconocido entre el resto de sus pares que se dedican a la práctica de este deporte. Su empresa estaba asociada a la Padi, Asociación Profesional de Instructores de Buceo, lo que permite a quienes reciben la instrucción practicar el deporte en cualquier parte del mundo. En la página web de su empresa familiar Rodrigo Fuenzalida quien residía en la capital contaba que se había iniciado a bucear a los ocho años.

Al lugar concurrieron efectivos de la Policía de Investigaciones y personal del Servicio Médico Legal que pasadas las 19.00 horas levantaron el cuerpo del instructor y lo derivaron a Quillota.

La capitanía de puerto abrió un sumario para determinar las causas del accidente.

La muerte de Rodrigo Fuenzalida se suma a la de un menor de nueve años que también falleció ahogado mientras se bañaba junto a una de sus hermanas en un sector no autorizado de Punta de Tralca. Los niños se bañaban en un sector de roqueríos mientras eran observados por sus padres, quienes al percatarse de las dificultades en que estaban los menores alertaron a la gobernación marítima de San Antonio que pese a llegar con patrullas sólo lograron rescatarlos.

Ambos fueron trasladados hasta la posta de El Quisco, donde se les realizaron reanimaciones. Posteriormente, la niña fue trasladada al Hospital Claudio Vicuña de San Antonio, donde hasta ayer permanecía estable dentro de su gravedad.