El comité de expertos de la Administración de Drogas y Alimentos de EE.UU, (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó la utilización de un medicamento para mujeres con un bajo nivel de deseo sexual. El fármaco, llamado flibanserina, es desarrollado por Sprout Pharmaceuticals, laboratorio que por tercera vez solicitaba la autorización para inciar su venta.
La flibanserina fue rechazada en 2010 y 2013 por la FDA, que argumentó que su efectividad era muy reducida y menor a los efectos secundarios que produce como somnolencia, mareos y nauseas, por lo que se pidieron más estudios.
El comité recomendó autorizar su venta por 18 votos a favor y seis en contra, aunque se pidió al laboratorio aminorar los efectos secundarios.
La FDA emitirá en agosto su decisión final, pero la mayoría de las veces, el organismo acepta el parecer de su comité de expertos.
Sulamita Miranda, académica de la Escuela de Química y Farmacia de la U. Andrés Bello, dice que por años estudios han demostrado que tratamientos con antidepresivos aumentan la cantidad de serotonina (neurotransmisor en el cerebro), pero disminuyen el deseo sexual, por lo que este fármaco busca el efecto contrario. "La flibanserina disminuye la conducción de serotonina del sistema nervioso y por esa vía, aumenta el deseo sexual", señala. También advierte que la pastilla está indicada para mujeres premenopáusicas, mayores de 18 años y con pareja estable.
Potente antídoto
Flibanserina ha sido publicitado como el antídoto para el Desorden de Hipoactividad del Deseo Sexual Femenino o deseo sexual hipoactivo. Personas con esta condición dicen que desean intimidad física, pero han perdido el apetito sexual. En la mayoría de las dificultades sexuales masculinas el problema es biológico y relacionado con dificultades en la erección del pene. Hoy tienen una veintena de medicamentos. En el caso de las mujeres, es más complejo: la falta de deseo responde a una interacción hormonal, la conformación química del cerebro, la relación con su pareja y la cultura.
"La sexualidad de la mujer involucra la mente, la donación de lo más profundo de su humanidad. Por lo tanto, una pastilla no resuelve su falta de deseo. Podría ayudar", dice Jorge Neira, ginecoobstetra de Red de Salud UC Christus, que agrega que la sexualidad femenina es muy distinta a la masculina y su gran órgano sexual es la totalidad de su persona.
Andrés Heerlein, siquiatra de la Academia Chilena de Medicina, coincide con este análisis. En el caso del hombre, dice, los problemas sexuales son más de potencia sexual, no de deseo. "La sexualidad de la mujer es más difícil de resolver con una simple droga", dice. "Se asegura que actúa sobre el deseo. Pero hay que ver si eso es efectivo. Si es así, sería una ayuda porque ahora no hay ninguna droga específica ni para la anorgasmia ni para el deseo hipoactivo".
Grupos a favor del llamado "viagra femenino" señalan que la FDA yaha aprobado 26 fármacos para el hombre y ninguno para las mujeres, los que tienen mucho más reparos que los diseñados para ellos, pero expertos han aclarado que la no aprobación actual responde a criterios científicos, no sexistas.