Tres torres de 22 pisos cada una se empezarán a levantar en forma simultánea en los próximos meses en Apoquindo con Vespucio. Tras concretar la compra del ex terreno de la Scuola Italiana, un equipo de arquitectos liderados por Marcos de Iruarrizaga y Pablo Letelier, junto a ingenieros y ejecutivos de FFV trabajan full time en el megaproyecto que se desarrollará en el paño de 11.300 metros cuadrados (m2).

En sociedad con Sebastián Fernández Riesco, sobrino del controlador de FFV, Eduardo Fernández León, el grupo a cargo de la iniciativa dividió el terreno en 5 paños. La idea es levantar primero tres edificios, con plantas libres de 850 m2. La fecha de inicio de faenas es abril próximo, tras la aprobación municipal. En paralelo, los dueños de la iniciativa conversan con otros inversionistas para sumarlos como socios. Trascendió que hay acercamientos bien encaminados.

Esta fórmula ya la ha usado FFV en sus proyectos, como el edificio de Alcántara con Apoquindo (en construcción), que vendió a ING antes de iniciar su desarrollo. Así lo hizo con otro edificio en Alsacia.

La primera etapa definida por FFV y Sebastián Fernández para el proyecto de la Scuola Italiana, que se llamaría Nueva Apoquindo, demandará US$ 125 millones (1 millón de UF por edificio). Cada torre tendrá 35 mil m2 construidos. El destino de los otros dos paños se definirá más adelante, y no se descarta tampoco la entrada de socios.