Señor director:
Más allá de la triste metáfora de la librería reemplazada por una farmacia, lo que ocurrirá en el sector del Drugstore de Providencia es grave.
La indudable calidad urbana del sector se debe, en gran medida, a la variedad y carácter de las actividades que animan su espacio público: cafés, librerías y otros comercios para los que la vitrina y la relación con el peatón son fundamentales. Su reemplazo por un comercio de gran escala, monofuncional y estéril en su vínculo con la calle, como supermercados, multitiendas o farmacias, se traducirá inevitablemente en la desaparición de la vida de barrio.
Ha llegado el momento de incorporar a la planificación de la ciudad y los barrios, una reflexión sobre la escala y el tipo de comercio permitidos, como en tantas ciudades cuya vida urbana nos maravilla.
Dino Bozzi F.
Arquitecto







