A las 9.27 horas de ayer un terremoto de 7,2 grados en la escala de Richter sacudió el centro y suroeste de México. Según el mexicano Servicio Sismológico Nacional (SSN), el epicentro se situó a 41 kilómetros de Petatlán, en el estado de Guerrero. El sismo también se sintió con fuerza en Ciudad de México. Hasta anoche no se había reportado la pérdida de vidas humanas ni precisado el número de heridos. Sin embargo, las autoridades informaron de daños materiales, cortes de electricidad, gente atrapada en ascensores, evacuación de edificios y crisis nerviosas. Tal temor de la población se funda en el recuerdo del terremoto de 1985, que alcanzó 8,1 grados en la escala de Richter y dejó alrededor de 10 mil muertos, según el diario mexicano Excélsior. En localidades como Acapulco (Guerrero) y Puerto Vallarta (Jalisco), en la costa del Pacífico, el sismo de ayer sorprendió a turistas en vacaciones de Semana Santa.