Mientras las economías desarrolladas se enfocan en hacer frente a los coletazos de la crisis en la eurozona, los países latinoamericanos surgen como opciones viables para el establecimiento de grandes empresas que antes no habían mirado hacia el continente.
Garmin, empresa norteamericana líder en servicios de navegación satelital, desembarcó en Chile mediante la compra de la distribuidora Centro GPS -que comercializa productos GPS- , adquisición que forma parte de su ambicioso plan de expansión por Latinoamérica que comenzó con la instalación de una oficina comercial en Brasil hace algunos meses.
El interés de la matriz por comprar una empresa en Chile se debió a que la firma había desarrollado un modelo de negocios que resultó atractivo para Garmin, destaca el gerente general de la compañía, Manuel José Cerda. "Desde aquí, de a poco, se van a ir tomando responsabilidades a otros países", afirma Cerda. De hecho, este mes se abrirá una oficina en Buenos Aires. Otros destinos serían países limítrofes, como Bolivia y Perú. En una primera etapa se establecerían más como apoyo logístico más que comercial, destaca.
El mercado de los GPS
La industria GPS abarca diversas áreas de desarrollo: automóviles, fitness, outdoor y marítimos. En Chile, el área de navegación para automóviles aún presenta un crecimiento elevado, a diferencia de países desarrollados, donde se tiende a prescindir de los equipos de navegación, debido a la integración de los servicios de esa tecnología con la telefonía móvil, señala el gerente general de Garmin.
Sin embargo, la misión de Garmin internacional es hacer crecer las áreas de fitness, outdoor y marino. "La fuerza más grande viene en esas tres áreas", afirma Cerda. Una de las ventajas de la compañía es que en el mercado nacional la competencia es escasa, lo que propicia el crecimiento en las áreas mencionadas.
Asimismo, el mercado latinoamericano presenta múltiples oportunidades de crecimiento, hecho que se potenciará al equipararse los precios de compra de un dispositivo, pues no habría diferencias significativas entre adquirirlo en EEUU o en Chile, señala el ejecutivo. "En unos meses más, la diferencia va a ser prácticamente el IVA", sostiene. De esta forma, dice, se controlará mucho mejor la distribución de la marca.
La empresa vendió en 2010 más de 20.000 unidades y en 2011 una cifra superior a las 40.000 unidades. Para este año se espera un gran crecimiento, apoyado principalmente en "una mayor oferta de nuevas líneas de productos, nuevos mapas de navegación y a una menor diferencia de precios de venta local comparados con los precios de venta retail en EE.UU.", sostiene el gerente general de Garmin.
El año pasado, la demanda de los equipos Garmin fue de 5% en navegación marina, 15% en outdoor, 10% en fitness y 70% en navegación personal
La empresa norteamericana aún no tiene presencia en el mercado de localización o control de flota -seguimiento satelital de flotas-, debido a que "le falta a los empresarios en Chile darse cuenta de que (el GPS) es una tremenda herramienta, pero que tiene un costo", enfatiza Cerda.
Agrega que los precios que se cobran en Chile son tan bajos, que "los márgenes no son tan buenos para las empresas que están dando estos servicios". Así las cosas, y de no mediar cambios en el sector, Garmin apunta a desarrollar una solución de rastreo "más orientada a las personas, de valor más económico", consistente en aparatos de menor tamaño. Este nuevo producto está en fase de prueba en Brasil.