Había una vez un grupo de productores de Hollywood que buscaba igualar el éxito obtenido por los estudios Pixar y películas como Toy story. Tres años después del estreno de las aventuras de Woody y Buzz, Dreamworks Animation debutó en la animación digital con Hormiguitaz, y aunque las críticas y la recaudación fueron positivas, los ejecutivos no quedaron conformes con su producto. Pero el encuentro con un libro llamado Shrek! hizo que la magia apareciera, cambiando la historia de Dreamworks y la del cine infantil. Con su mezcla de aventuras e ironía, las cintas en torno al ogro Shrek, Burro y Fiona se convirtieron en una mina de oro, pero cuando la veta comenzó a agotarse, fue necesario encontrar un nuevo filón para explotar: uno de sus personajes secundarios.

Fue así como en 2004, cuando la segunda de las Shrek llegaba a los cines, que Dreamworks anunció que Gato con Botas tendría su propia película, nuevamente con Antonio Banderas poniendo la voz del felino, tanto en la versión en inglés como la en español. A comienzos del 2010, la cinta dirigida por Chris Miller estaba completada y se conocía su trama, que lleva la acción a varios años antes de que el gato conociera a Shrek. Aquí y con una fama de héroe y conquistador, Gato con Botas quiere robar a Jack y Jill las habas mágicas que le permitan llegar a la casa de los gigantes para robar a la gansa de los huevos de oro. Pero su plan se complica cuando descubre que alguien más pensó en lo mismo: la gata Kitty (en voz de Salma Hayek).

"Es un sinvergüenza manipulador. Es infalible con el tema de los ojos, es imposible que nadie se rinda ante la mirada del peluche de Shrek", le aseguró Banderas sobre su alter ego a EFE, en medio de la exhibición de los 20 minutos iniciales del filme que se hizo en el Festival de San Sebastián, en septiembre. En la ocasión, el actor también reveló detalles sobre Gato con Botas, como sus referencias a otros filmes: "Incluye muchas referencias a películas que yo he hecho antes, engancha también con los Shrek en la parte de cuentos tradicionales, y con el Zorro, por supuesto". También reveló que para la cinta hizo cuatro versiones con la voz del personaje: la original en inglés, una en español para América Latina, otra con acento andaluz para España y una cuarta en italiano. Todo gracias a la fibra óptica que, desde cualquier lugar del mundo, lo unía a los estudios de doblaje de Dreamworks en Los Angeles, EE.UU.