Ayer comenzó a operar nuevamente, tras 55 días detenido, el horno eléctrico de Gerdau Aza. La unidad, dañada por el terremoto del 27 de febrero, es la encargada de producir las palanquillas con que se fabrican barras de acero. Los principales daños del horno se concentraron en su sistema de suministro de energía y las fundaciones de la estructura.

Con la puesta en marcha de la planta de acería, Gerdau Aza recupera así su total capacidad productiva. En mayo, la producción de Gerdau Aza recuperará su ritmo normal de más de 40.000 toneladas de acero al mes.