Pese a la molestia que provocó en el oficialismo la presencia de Sebastián Piñera en el acto de conmemoración del Día de las Glorias de la Infantería el domingo, en Arica, el gobierno intentó ayer dar por cerrada la polémica.
"El Ejército actuó bien, pues la diputada Ximena Valcarce solicitó una invitación para el señor Piñera.
En ese sentido, se actuó de acuerdo a las normas de protocolo. Y según esas normas, se le ubicó en tercera
o cuarta fila", dijo ayer, en Iquique, el ministro de Defensa, Francisco Vidal. El ministro agregó que
"no voy a entrar en polémica, que juzgue la ciudadanía lo que han visto en imágenes", en alusión al protagonismo que tuvo Piñera en el desfile. En todo caso, llamó "a ser prudentes en esta época electoral".
Por su parte, la vocera de gobierno, Carolina Tohá, sostuvo que "no hay problemas en que haya candidatos, pero es esperable que todos sean invitados".
En el comando de Piñera, en tanto, consideraron que en esta materia el gobierno y la Concertación actuaron con "soberbia y descontrol". El generalísimo de Piñera, Rodrigo Hinzpeter, denunció un doble estándar del oficialismo, pues nada dicen sus dirigentes cuando su abanderado, Eduardo Frei, participa en actos de gobierno.