Desde que Jorge Sampaoli asumió como seleccionador ha tenido que convivir con problemas de lesiones en sus nominados; con la renuncia, por ejemplo, de Humberto Suazo, y la nueva negativa de David Pizarro. El argentino no ha podido trabajar tranquilo y, encima, los fanáticos de Perú tienen preparado un plan para "no dejar dormir" a la "Roja". En ese contexto, la selección chilena viaja esta tarde a Lima, en vuelo chárter que parte a las 14.00.

Y lo hace con un pensativo Sampaoli, pues el DT aún evalúa alternativas para conseguir un triunfo que ponga de nuevo a Chile en los puestos de vanguardia de las clasificatorias sudamericanas.

El martes, por ejemplo, el entrenamiento consistió, en su gran parte, en el rechazo de balones aéreos. Allí, el protagonista siempre fue Marcos González. El de Flamengo sumó muchos puntos en aquella jornada y ahora es una carta casi segura para fortalecer la defensa.

El ex Universidad de Chile mide 1,90 metros y también ingresaría para subir el promedio de estatura de los zagueros nacionales. De hecho, su presencia, junto con Gary Medel, José Rojas y Eugenio Mena, alcanza para promediar 1,78 metros, un centímetro menos de la que presentará Perú. La escuadra de Sergio Markarian se ha hecho fuerte en el cabezazo y los nombres de Juan Vargas (1,80 metros), Alberto Rodríguez (1,83) y Claudio Pizarro (1,86), por ejemplo, son los más reconocidos para buscar el gol mediante sucesivos centros.

González será el más alto en el campo y deberá complementarse con Medel y Rojas, quienes se transformarán en stoppers cuando Eugenio Mena pase a ser volante por la izquierda. De esa forma, Chile quedará con tres defensores y el "Pitbull" actuará en la zaga, tal cual lo hacía en el proceso de Marcelo Bielsa y como lo hizo frente a Egipto (2-1).

Tinte azul

En Perú, la cobertura de la selección chilena ha sido con mucho tinte azul. La campaña de Universidad de Chile en la Copa Sudamericana 2011 ha sido el mejor ejemplo en Lima para saber cómo será la disposición táctica y el desarrollo de la "Roja" en el Nacional de Lima.

En ese sentido, Charles Aránguiz vuelve a recobrar la vital importancia que el casildense le dio al volante en su exitoso período con los estudiantiles. "Aránguiz formó una buena sociedad con (Eduardo) Vargas en la Sudamericana. Tiene mucho ataque y apariciones sorpresivas", explicó ayer Sampaoli.

Y claro, el "Príncipe" jugará al lado de Mauricio Isla en el mediocampo y detrás de Vargas, buscando crear un tridente que complique a Yoshimar Yotún y a Juan Vargas, quien subirá menos por la banda ante tanta amenaza.

La razón del papel de "cerebro" de Aránguiz descansa en que Sampaoli no podrá contar con un enganche "clásico". Jorge Valdivia se ausentó por un desgarro y Matías Fernández, quien ayer practicó a la par de sus compañeros, no está en óptimas condiciones para asumir la titularidad.

Por eso, "Edu" será el encargado de desbordar y alimentar, junto a Aránguiz, a Alexis Sánchez. El tocopillano actuará de igual manera que en Barcelona, pero en la izquierda tendrá de socio a Jean Beausejour.

Sampaoli le ha otorgado una doble función al zurdo del Wigan Athletic: la de ser punzante en el ataque y la de retroceder para acumular más gente en el mediocampo y tapar la creación de Rinaldo Cruzado, Luis Ramírez y Carlos Lobatón.

El otro González

Mark González está trabajando silenciosamente con la Selección al igual que lo hizo en España, en la previa del duelo amistoso con Egipto que se realizó en Madrid.

El zurdo del CSKA de Moscú se está recuperando de una lesión que ejerce presión sobre los nervios y tejidos del muslo derecho, y el tratamiento lo ha desarrollado junto al médico cubano José Amador, quien es parte del staff de Sampaoli.