Hace 20 años, Andrónico Luksic Abaroa cumplió una de sus grandes aspiraciones: llegar con sus inversiones a Croacia. No era una tarea fácil. El conflicto de los Balcanes recién había terminado, con las consecuencias e incertidumbres de lo que implicaba la posguerra. Pese a ello, el patriarca del grupo quería hacer una apuesta por su tierra natal.
Fue así como entre septiembre de 1993 y marzo de 1994 comenzó el análisis de la primera inversión que materializó en ese mercado: la cervecera de Karlovac. La operación no fue complicada: el grupo fue el único que se presentó a la licitación pública, por tanto, el problema más bien era el momento. Todavía había guerra, un 25% del país estaba ocupado, incluyendo zonas cercanas a Karlovac. El panorama era el de un territorio devastado, la ciudad estaba aún sitiada, los techos con sacos de arena y los edificios con esquirlas.
Pese a ello, primaron la convicción y la decisión de Andrónico Luksic Abaroa de jugársela por Croacia en un momento en que pocos se atrevían, y en marzo de 1994 el grupo adquirió un porcentaje cercano al 30% de la compañía, la cual estaba en poder del fondo de privatización de Croacia.
La jugada tuvo resultados, ya que permitió al grupo conocer en profundidad el país y buscar nuevas alternativas de negocios.
Fue así como en junio de 1999 inició el proceso de análisis de posibles compras en el ámbito turístico, y la oportunidad apareció pronto de la mano de Atlas, el principal operador del sector en tierra de Croacia, pero que llevaba años registrando pérdidas en sus operaciones. La gestión del grupo Luksic logró revertir la situación, pasando a ser rentable.
En 1999 se produjo la primera compra hotelera del grupo, el Hotel Argentina, que incluía la villa Sherezade y 130 habitaciones. Eran los primeros pasos de una apuesta mayor, que hoy los tiene en la cresta de la ola en materia hotelera.
El turno de Davor
Con la misma convicción de su abuelo, hace tres años Davor Luksic aceptó el reto que le puso su tío Guillermo y dejó Londres para partir a Zagreb a hacerse cargo de los negocios de la familia en el país europeo. Veinte años después de la primera apuesta en Croacia, el nieto del patriarca acaba de convertir al grupo en el principal actor de la industria turística local, con la adquisición de la cadena Istraturist, en Istria.
Tras la operación, que implicó 120,4 millones de euros, el grupo duplicó la capacidad de sus hoteles, departamentos y campings, hasta llegar a un consolidado de 46 mil camas, que lo convierte en número uno de la industria hotelera croata, con un 7% de participación en un mercado altamente competitivo y donde el turismo es una de las principales actividades económicas.
La vida de Davor Luksic en Croacia ha sido intensa. Es muy activo en la toma de decisiones del día a día de las empresas: casi todas las semanas hace un comité ejecutivo con los gerentes y está habitualmente viajando entre Zagreb, Dubrovnik e Istria, donde se distribuyen las principales inversiones.
También se ha tomado muy en serio ser el representante de la familia en Croacia, ya que, además, se preocupa de analizar y desarrollar nuevas oportunidades de negocios en la región y mantener buenas relaciones del grupo con las comunidades donde están emplazadas sus actividades, así como con el mundo empresarial y las autoridades. De ahí que su agenda considere encuentros con ministros y autoridades, bancos y el mundo empresarial, con quienes se reúne en forma permanente, logrando que el apellido Luksic sea reconocido en la comunidad.
Desde que aterrizó en Croacia le ha tocado liderar una etapa de expansión importante y de reorganización de las inversiones. Esto ha implicado finalizar la compra de Adriatic Luxury Hotels (ALH) y ejecutar la fusión de las operaciones en Dubrovnik, lo que en ese entonces era Excelsa Hotels (Hotel Croacia, Argentina, Supetar y Odisej) con ALH (Hoteles Excelsior, Palace, Bellevue, Kompas y Hotel Bonavia en Rijeka).
Hoy, la operación hotelera del grupo consiste en tres compañías: Adriatic Luxury Hotels, ubicada en Dubrovnik; Plava Laguna, ubicada en Porec (región de Istria) e Istraturist, ubicada en Umag (región de Istria).
Adriatic Luxury Hotels está enfocada a un turismo más exclusivo, en Dubrovnik, donde se concentran la mayoría de los hoteles cinco estrellas del grupo.
En Istria la operación apunta más al volumen. Aquí se encuentran Plava Laguna e Istraturist. Ambas son muy similares en cuanto a tamaño, pero se diferencian en la estructura. Por ejemplo, Istraturist tiene más departamentos o bungalows que Plava Laguna, mientras ésta tiene más capacidad en hoteles. En campings, la capacidad es similar.
Las tres compañías se manejan en forma independiente, tienen su propio directorio y Davor Luksic es presidente ejecutivo.
La principal medalla: Istriaturist
Desde que Davor Luksic está en Croacia, el grupo ha renovado gran parte de sus hoteles con inversiones importantes, pasando a muchos de ellos a categorías superiores. Pero con seguridad, el mayor trofeo es el que acaba de conseguir, ya que fue él quien lideró la compra de Istraturist, un proceso extenso que llevó casi un año de negociaciones.
En una nota de prensa enviada a los medios locales, el grupo explicó que el año pasado sus agencias de turismo Plava Laguna y Adriatic Luxury Hotels recibieron a alrededor de 450 mil pasajeros y tuvieron 2,8 millones de pernoctaciones. "Al agregar Istraturist, estas cifras ascenderían aproximadamente a 700 mil pasajeros y 4,5 millones de pernoctaciones, convirtiéndonos en el mayor participante de esta industria estratégica de Croacia", explicó Davor Luksic.
Con la reciente adquisición, el grupo tiene aproximadamente el 7% de cuota de mercado en alojamiento (medido por noches de estadía), una cifra importante para una industria sumamente competitiva y atomizada que, además, compite con países cercanos como España, Grecia y Turquía.
Estos mercados han sido mirados por el grupo. Se han analizado oportunidades de negocios en el sector hotelero, pero la decisión que ha primado ha sido la de consolidar las operaciones en Croacia, ya que siguen habiendo opciones atractivas para invertir.
Tras la compra de Istraturist, la idea es concentrarse en la compañía para transferir las prácticas que se han realizado de mejor forma en Plava Laguna y aprender de las que Istraturist realiza mejor, de modo de aprovechar el máximo potencial de ambas compañías y maximizar las sinergias, así como seguir invirtiendo en los activos existentes.
En la nota de prensa, Luksic señala: "Hace 20 años hicimos nuestra primera inversión y 20 años después hemos consolidado nuestro compromiso como inversionistas de largo plazo en Croacia".