Detalles tan simples como el color de un ícono pueden revelar las intenciones de una compañía. Así es como Hangouts, el sucesor de Google Talk -lanzado durante la conferencia I/O de Google-, abandona el antiguo color gris de su marca para emigrar al verde. El mismo color que también usan WhatsApp y Line, los actuales reyes de la mensajería instantánea a través de celulares.
Pero Hangouts tiene mucho más que cambios estéticos, ya que posee una cantidad de ventajas sobre su competencia. Aunque también desaciertos.
Para comenzar, la aplicación puede ser usada tanto en el computador como en el celular. En el caso del PC, se puede seguir usando a través de Gmail, pero también bajar una extensión para Google Chrome que permite usar el chat mientras se navega en otra página.
Para el caso de los celulares Android, simplemente hay que actualizar la aplicación de Google Talk, para que automáticamente éste sea reemplazado por Hangouts, el que -por primera vez- también podrá ser usado para equipos iOS, como el iPhone y el iPad.
Al actualizar GTalk, los usuarios podrán acceder a una lista de contactos unificada entre las personas que usan Gmail, Google+ y los que tienen en su agenda telefónica; iniciar conversaciones grupales con hasta 10 personas simultáneamente, y acceder a más de 800 nuevos íconos o "emojis" para adornar los textos.
Pero la principal ventaja sobre sus competidores es que permite iniciar un videochat entre diferentes usuarios, sin importar el formato que estén usando.
Pero no todo funciona bien. Uno de los principales problemas que posee la nueva aplicación es que ya no permite ver cuando los usuarios están conectados o no. Esto, porque se supone que, aunque no esté conectado, el mensaje le llegará una vez que lo haga. Pero en el antiguo GTalk se podía ver qué personas estaban disponibles: una ventaja a la hora de comunicarse con alguien. Aun así, Google afirmó que está trabajando en hacer el sistema compatible con SMS, precisamente para estos casos.
Otro problema: algunas dificultades con la sincronización de las agendas entre las versiones de PC y las móviles, lo que impide seguir una conversación pasando de un formato a otro.