Una drástica disminución de su volumen hídrico muestra el embalse La Paloma, el depósito más importante para riego de la Región de Coquimbo. Según la Dirección General de Aguas de la IV Región, esta reserva posee sólo un 7% de su capacidad total, que asciende a 748 millones de metros cúbicos.

La condición actual del depósito -la peor desde 1997- fue captada por el satélite FASat-Charlie, el 19 de enero pasado, y decodificada por el Servicio Aerofotogramétrico (SAF) de la Fuerza Aérea de Chile (Fach).

Según Leonardo Ibarra, capitán de bandada y jefe del Departamento de Geomática del SAF, en las imágenes se puede apreciar la formación de canales anastomosados en los alrededores del embalse, huella que se observa en el sector sureste del recinto.

El especialista sostuvo que con este tipo de imágenes se pueden conocer los cambios que ha tenido -en el tiempo- un territorio, para desarrollar iniciativas de  planificación urbana. Recordó que el satélite FASat pasa cada 37 días por el mismo punto y registra secuencias a 620 kilómetros de altura.

Cambios en la reserva

A su vez, el Servicio Aerofotogramétrico de la Fach hizo un compendio de imágenes históricas de La Paloma. En éstas se ven los períodos en que ha habido variaciones de volumen.

Según explican en el servicio, ello se refleja en la fotografía aérea obtenida en 1978, a casi una década de que comenzara a operar este lugar de abastecimiento hídrico. En la imagen de 1997, obtenida casi dos décadas después, se puede observar cómo se desarrollaron cultivos alrededor del embalse.

La situación de hoy en La Paloma es radicalmente distinta: posee apenas 54.238.750 millones de metros cúbicos, es decir, el 7% de su máximo volumen, que alcanza los 748 millones de metros cúbicos, según la DGA de Coquimbo.

La administración de La Paloma informó que el nivel más bajo de agua se presentó en mayo de 1997, cuando se llegó a 45 millones de metros cúbicos. Sin embargo, un mes después hubo un temporal de precipitaciones, por lo que pudo volver a rellenarse. Según la entidad, el embalse podría llegar a un mínimo histórico de 15 millones de metros cúbicos, en mayo próximo.

Felipe Martin, secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego del Ministerio de Agricultura, explicó que, pese a  esta situación, el riego para la agricultura está asegurado.

“La Paloma está en un nivel crítico, pero por eso se están tomando medidas, por parte de la autoridad,  como la entrega de recursos para geomembranas para canales de riego, para que haya eficiencia hídrica”, señaló Martin. Agregó que ese proyecto se suma a la siembra de nubes en la IV Región (estimulación de estas formaciones con yoduro de plata), para la que no ha habido posibilidades aún en la zona. La condición normal anual de precipitaciones en la IV Región es de 78 milímetros de agua.

La seremi de Agricultura de la IV Región, Daniela Norambuena, explicó que son siete mil agricultores los que viven de los cultivos de uva, paltas y cítricos, que han debido organizarse para poder aprovechar el agua.

Sostuvo que hoy están usando un 38% de la totalidad de derechos de agua que poseen, para ahorrar.