Se acerca un nuevo proceso para realizar la encuesta más importante del país, que permite caracterizar a la población chilena y definir nuevas políticas públicas: el censo. Y aunque se hará en 2012, desde hace más de un año que el INE trabaja intensamente en su producción.

Entre las preguntas que están siendo testeadas, se estudia la incorporación de consultas sobre las relaciones de hecho. Esto incluye la alternativa de la convivencia con una pareja del mismo sexo.

De incorporar en el cuestionario, esta sería la primera vez que el Censo contabiliza a las parejas homosexuales en el país.

Si bien no se tiene certeza de qué preguntas se incluirán en el cuestionario final, ya hay 62 que están siendo "probadas".

Por ejemplo, se evalúa consultar sobre la identificación con los pueblos indígenas. Además, analiza aumentar las alternativas para incluir preguntas relacionadas con la comprensión y la capacidad de hablar la lengua de la que se dice pertenecer o identificar. Otras de las consultas incorporadas tienen relación a cómo llega el agua a las viviendas, los cambios tecnológicos incorporados a las casas, el uso de la leña, la manera de eliminar la basura y los tiempos de traslado entre la casa y el trabajo.

No más de 40 preguntas

Según el jefe del proyecto Censo 2012, Eduardo Castro, "para un proceso como este no pueden ser más de 38 a 40 preguntas las que se realizan", debido a que un cuestionario más largo produce agotamiento y baja la calidad de las respuestas.

Desde marzo el organismo comenzó a trabajar en dos procesos que permitirán determinar el cuestionario final: el primero consiste en que en 15 ciudades del país, desde Copiapó a Puerto Montt, se están realizando focus groups que ayudan a resolver "cómo se interpretan las preguntas y cómo se elaboran las respuestas", dice Castro.

El segundo es el que se está haciendo en Arica, Santiago y Concepción, donde de manera aleatoria se está realizando la encuesta con tres versiones distintas y las que integran algunas de las 62 preguntas de manera mezclada, luego sólo 40 serán seleccionadas. Durante los meses de mayo y junio se revisarán, con los distintos entes que han estado involucrados en el proceso, como universidades, iglesias, pueblos originarios, ministerios, etc., cómo funcionaron las preguntas en la práctica. Para que en julio se defina cuál será el cuestionario final.