La emblemática Plaza Ñuñoa estrenará nuevas instalaciones que prometen convertirse en un aporte para los vecinos del barrio durante este año: 10 máquinas de ejercicio y un restaurante en el tradicional odeón.

Esta semana estará listo el gimnasio al aire libre, que estará ubicado en el sector sur de la plaza, cerca del límite con calle Dublé Almeyda. "Se trata de un circuito completo de ejercicios, porque incluye desde máquinas para trabajo cardiovascular y de musculación hasta aparatos para elongar el cuerpo", explica Roberto Epuleo, director de la Secretaría de Planificación (Secpla) del municipio. Entre éstas habrá elípticas, caminadoras aéreas y las clásicas máquinas para ejercitar las piernas y abdominales.

Esta iniciativa forma parte de un plan integral que el municipio está ejecutando para dotar con circuitos deportivos a varias plazas de la comuna, además de mejorar el mobiliario urbano en algunas de ellas, con nuevos escaños y luminarias. Ya se remodelaron los parques Juan XXIII, Guillermo Franke, Pedro Montt y el de Amapolas, y este mes comienzan los trabajos en el sector sur del Parque Bustamante (cerca de Santa Isabel) y las plazas Los Presidentes, Germán Picó Cañas, Villa Olímpica y Zañartu. En abril sucederá lo mismo con otras cinco áreas verdes de Ñuñoa. "En total, se invertirán $ 380 millones en estos circuitos deportivos", dice Epuleo.

En noviembre de 2011 se abrió un gimnasio municipal a un costado de la Plaza Ñuñoa, en calle Manuel de Salas, que ya cuenta con 1.000 vecinos inscritos. "Queda muy cerca de mi casa y paso antes de irme al trabajo. Ahora, también me gusta mucho la idea de tener máquinas deportivas en la misma plaza", explica Nelson Gutiérrez, vecino del sector.

Además, este año se construirán dos nuevas ciclovías. "Una tendrá 1,2 kilómetros y recorrerá el canal San Carlos, desde Eliecer Parada hasta Av. Américo Vespucio ($ 120 millones), y la otra, aunque el trazado aún no está definido, se emplazará en los alrededores del mall Portal Ñuñoa. Esta última es parte de las obras de mitigación (que debe ejecutar Cencosud)", agrega Epuleo.

El nuevo restaurante

Otra de las iniciativas que se materializarán en 2012 es la construcción de un restaurante -no sólo cafetería- en el antiguo odeón de la Plaza Ñuñoa, ubicado frente al bar Las Lanzas. "Se trata de un lugar pensado para toda la familia y que no tendrá el formato de un pub o bar", explica Epuleo. La licitación de este espacio se la adjudicó, en marzo del año pasado, el empresario Osvaldo Espinoza, quien es dueño de la cadena de heladerías La Foca.

Hasta ahora, ese sitio ha servido como albergue de indigentes, que pasan la noche al interior. Con este proyecto se espera reducir la delincuencia y los problemas sanitarios que se generan ahí por lo mismo.

Sin embargo, el inicio de las obras ha tardado más de lo previsto. "El odeón tiene un subterráneo, donde hay instalaciones eléctricas que deben ser removidas por la compañía respectiva (Chilectra), pero aún no está claro cuándo se realizarán esos trabajos", agrega el director de la Secpla.

El cambio de imagen del odeón -también conocido como "La Pérgola"- contempla rescatar esta estructura de albañilería armada, que hoy luce sus muros y cornisas dañados. Esta quedará al interior del restaurante, ya que el local abarcará otros 300 metros cuadrados que circundan a la pérgola y que serán rodeados con paneles de vidrio. La cocina, en cambio, se instalará en el subterráneo de este recinto. En total, se invertirán $ 250 millones y la concesión durará 30 años.