"Fue increíble, en segundos varias casas sencillamente desaparecieron, hasta un monte desapareció". Así describió Paulo Alves, un poblador de la localidad argentina de San Pedro, en Misiones (noreste del país), el paso de un sorpresivo e intenso tornado que afectó a la zona durante la noche del lunes y las primeras horas de ayer, en medio de un fuerte temporal. El fenómeno también alcanzó a la ciudad brasileña de Guaraciaba, en el estado de Santa Catarina, cerca de la frontera con Argentina.
En total, 10 personas murieron en Argentina -siete de ellos niños, de entre seis meses y ocho años-, mientras, las autoridades de Santa Catarina reportaron al menos cuatro víctimas fatales. En tanto, los heridos habrían superado los 120.
Testigos relataron ayer que la fuerza de los vientos -estimada sobre 150 km/h- hizo perder a una madre una guagua a la que prácticamente el viento "le arrancó de sus brazos", según dijo el alcalde de San Pedro, Orlando Wolfart, a radios argentinas. Según la autoridad, el fenómeno "es algo nunca visto acá y destruyó todo a su paso". El poblador José Domínico relató al diario argentino La Nación que "la tormenta mató todo. Arrasó con lo que había y no dejó ni un animal vivo (...). Durante 20 minutos cayeron gotas de granizo que parecían grandes huevos de gallina".
Fenómeno inusual
La meteoróloga transandina María Luisa Altinger -consultada por el diario Clarín- explicó que es frecuente que se produzcan tornados en algunas zonas del país, aunque la mayoría de ellos se concentra entre octubre y marzo, por lo que consideran inusual el fenómeno que afectó ayer al norte del país. La experta dijo que el tornado se caracteriza por ser una tormenta severa que se desarrolla con mucha intensidad -por lo que resulta imposible predecirlo- y que puede extenderse por varias horas.
El director de la Defensa Civil de Misiones, Ricardo Veselka, aseguró que "es la primera vez que ocurre algo de tal magnitud" en la zona. "Teníamos relámpagos, descargas eléctricas, pero se desarrolló sin esperarlo", dijo.
Hasta ayer, las autoridades aún no podrían hacer una evaluación monetaria de los daños, aunque sí el gobierno central calificó a las zonas afectadas como "catástrofe". La Presidenta Cristina Fernández viajará hoy a la zona para evaluar los daños.
En Santa Catarina, en tanto, la ciudad más castigada por los vientos fue Guaraciaba, donde la tormenta dejó cuatro muertos, 64 herido y un 70% de las viviendas dañadas, por lo que el municipio dictó estado de calamidad. "No tengo dudas de que fue un tornado, ante el tipo de destrucción", afirmó el director de la Defensa Civil de Santa Catarina, Marcio Alves, quien agregó que los fuertes vientos afectaron a 2.300 edificaciones y dejaron decenas de heridos.
Alves dijo que el fenómeno provocó cortes de energía en unas 30 localidades fronterizas y que incluso afectó a Paraguay. Las autoridades agregaron que hubo fuertes ráfagas de viento en el estado brasileño de Río Grande do Sul, donde al menos 310 personas abandonaron sus casas.