Bélgica: T. Courtois; L. Ciman (75', Y. Carrasco), T. Alderweireld, T. Vermaelen, J. Vertonghen; A. Witsel, R. Nainggolan (62', D. Mertens); K. De Bruyne, M. Fellaini, E. Hazard; R. Lukaku (73', D. Origi), DT: N. Wilmots.

Italia: G. Buffon; A. Barzagli, L. Bonucci, G. Chiellini; A. Candreva, M. Parolo, D. De Rossi (78', T. Motta), E. Giaccherini, M. Darmian (59', M. De Sciglio); G. Pellè, E. Martins (75', C. Immobile), DT: A. Conte.

Goles: 0-1 32' Giaccherini tras recibir sin marca dentro del área un pase largo de Bonucci; 0-2 90'+3' Pellè de voleta tras habilitación de Candreva.

Arbitro: M. Clattenburg (ING), amonestó a Vertonghen (B); y a Bonucci, Chiellini, Martins y Motta (I).

Estadio Grand Stade, Lyon. Asistieron 55.408 personas.

Fernando Contreras

Era uno de los duelos más esperados de la primera fase de la Eurocopa. Bélgica e Italia se medían en un choque de estilos. Por un lado el buen toque y funcionamiento colectivo de los belgas y, por el otro, el orden táctico y defensivo de los italianos.

Y aunque el juego comenzó con imprecisiones por parte de ambos equipos, finalmente se impuso el estilo italiano que, durante los 90 minutos, le cedió la iniciativa a su rival y apostó al contragolpe como su principal vía para acercarse al arco de Courtois.

Bélgica tuvo la pelota, pero no las ideas. Hazard y De Bruyne, las principales figuras, tuvieron un primer tiempo para el olvido y fueron incapaces de marcar diferencias en el último tramo de la cancha. Y aunque Hazard apareció en el complemento, su juego tampoco trascendió mayormente y no pudo evitar la caída.

Italia hizo lo que más sabe hacer. Defendió con autoridad y pareció controlar el juego desde el fondo de la cancha. Utilizó pelotazos cruzados desde la última línea y apostó por la velocidad de sus hombres de ataque. Atacó poco, pero lo hizo bien, a diferencia del conjunto belga, que no tuvo ideas y sólo apostó a inspiraciones individuales y remates de media distancia que inquietaron poco al experimentado Buffon.

Italia sumó tres puntos que lo dejan bien aspectado de cara a los próximos dos duelos de la fase de grupos. Mientras, Bélgica tendrá que mejorar mucho para intentar ratificar el rótulo de mejor generación de jugadores de su historia.