El ingreso a clases y el fin de las vacaciones han aumentado los flujos vehiculares en todo el país. En Santiago, durante las dos última semanas creció en 43% la cantidad de automóviles que recorren las calles durante la hora punta y el Metro ha aumentado su afluencia en 25% en relación a febrero. El general Leonidas Venegas, jefe de Tránsito y Carreteras de Carabineros, entregó un balance de cómo se desarrolló el inicio de marzo.

¿En qué consistió el despliegue realizado por Carabineros esta semana?

Existe un trabajo de coordinación, con el Ministerio de Transportes y la Intendencia Metropolitana, respecto a los trabajos que hacer para enfrentar la congestión. Estuvimos presentes en 70 puntos realizando un trabajo de complemento de los semáforos, agilizando el tránsito de las personas distraídas. Estos lugares se comportaron de manera adecuada conforme al volumen de vehículos que había. Y los seguiremos monitoreando.

¿Cuáles fueron los puntos más conflictivos?

Teníamos preocupación respecto a los grandes trabajos, como en Avenida Vicuña Mackenna, donde hubo un buen comportamiento porque la gente ya estaba ocupando vías alternativas desde el año pasado. Lo mismo en la zona de Pérez Zujovic (…). El jueves encontramos un tránsito mayor en Santa Rosa, entre Vespucio y Lo Ovalle, que se fue normalizando durante el día.

¿Cómo se evaluó el aumento masivo de automóviles?

El jueves ingresó una gran cantidad de alumnos a los colegios, pero la gente entró de forma paulatina a sus trabajos y también los escolares y universitarios, lo que permitió que el regreso al régimen normal no fuese tan traumático como en otros años. Hay que tener presente que Santiago es una ciudad congestionada. Se ha trabajo por la sincronización de los semáforos y en aquellos lugares con mayor flujo, debe estar presente carabineros para agilizarlo, pero obviamente en los horarios peak existe un tránsito más lento.

¿Medidas como la tarificación vial o la restricción vehículos catalíticos ayudarían a disminuir la congestión?

Lógicamente que la disminución de cantidad de vehículos haciendo uso de las vías favorece el tránsito. El transporte público tiene sus vías exclusivas. Una tarificación vial o la restricción a catalíticos deberían disminuir los tiempos de viaje, pero hay que hacer una serie de análisis para saber si son convenientes o no.

¿La mala conducción o los accidentes vehiculares influyen en la congestión?

Prevenir los accidentes es clave, ya que todos provocan una gran congestión a su alrededor. Hay que tener muy claro que el peatón, el ciclistas, el motociclistas y el conductor deben ser respetuosos con el resto para que no haya accidentes, que permite que la congestión no se sobredimensione, porque se genera un efecto multiplicador, no solo en el punto de conflictos.

¿Cómo cree que manejan los conductores santiaguinos?

El conductor de más de 30 años no es un buen conductor. No respeta al resto, ya sean ciclistas, motociclistas u otros conductores. El que tiene un mayor nivel de respeto es aquel conductor de entre 18 y 30 años, pues el más grande está bajo otra cultura de lo que es la seguridad vial. Y en eso influye la obligación de realizar cursos y mayores exigencias para obtener la licencia de conducir.