Minutos antes que Sebastián Piñera llegara con Joaquín Lavín al Mirador Neruda en Viña del Mar, miembros del comando presidencial retiraron del lugar todo el material que hiciera alusión a la contienda senatorial de la V Costa.
¿La razón? Evitar cualquier "ruido innecesario" durante el acto donde reapareció el ex edil UDI, 17 días después de su derrota en la parlamentaria frente al RN Francisco Chahuán.
Desde el entorno de Lavín dicen que su participación en la gira de ayer -que incluyó visitas a Casablanca, San Antonio, Algarrobo, Cartagena y El Quisco- le generó cierta "incomodidad".
Sin embargo, el mismo ex alcalde optó por dar un gesto de unidad y declaró que "todo lo que ocurrió en la parlamentaria es una hoja que ya se dio vuelta (...). Mi incorporación al comando es un testimonio de que estoy en el servicio público no por un proyecto personal".
Piñera -quien ayer recibió el apoyo del animador de TV Kike Morandé y que en varias oportunidades habló de "mi gran amigo Joaquín"- no detalló el rol que Lavín asumiría en un eventual gobierno suyo, aunque reiteró que "él aportará toda su experiencia y talento".
Y aunque su participación en las giras del abanderado por las regiones no se repetirá y tampoco asumirá ninguna vocería en el comando, el otrora presidenciable de la UDI espera comenzar su trabajo junto al coordinador de los Grupos Tantauco, Cristián Larroulet, el lunes, apenas él vuelva de un viaje al sur del país.