Cerca de las 10.00 comenzó ayer en La Moneda el comité político extraordinario convocado por el Presidente Sebastián Piñera para analizar el informe de la Contraloría -emitido en la víspera- que planteaba reparos al proceso de condonación de intereses y multas por deudas tributarias a la multitienda Johnson's, y que detonaría la salida del director del Servicio de Impuestos Internos, Julio Pereira.

La auditoría del ente fiscalizador (ver nota secundaria) reflotaba los cuestionamientos a la actuación de Pereira en el proceso y volvía a colocar al gobierno en un escenario complejo. Por esto -según asistentes a la reunión- el Mandatario pidió al ministro de Hacienda, Felipe Larraín, resolver el alejamiento del funcionario.

De acuerdo con la misma versión, Larraín habría manifestado en la cita su disconformidad con la decisión, argumentando que el gobierno aparecería cediendo ante las nuevas presiones de la oposición. Una postura similar a la expresada durante el día por algunos dirigentes de la Alianza, como el secretario general de la UDI José Antonio Kast.

El tema activó un intenso debate entre los ministros que participaron del comité político, pues si bien existía conciencia de que Contraloría no detallaba irregularidades, también se advirtió que la permanencia de Pereira se hacía "insostenible".

Así, el ministro Larraín dejó la reunión en Palacio cerca de las 11.30 con la instrucción de que el director del SII debía dejar sus funciones.

"He decidido poner mi cargo a disposición del Presidente de la República, agradeciendo la profunda confianza en mi persona", afirmó Pereira casi ocho horas después de concluida la cita del comité político, en una rueda de prensa.

El saliente funcionario afirmó que durante toda su gestión actuó con "las más estrictas normas morales y éticas", situación que, agregó, esperaba ratificar en el sumario administrativo que se encuentra en curso.

Aunque fuentes oficialistas señalaron que la salida de Pereira era "un secreto a voces" en el gobierno y que estaba prevista para mediados de mes, se coincidió en que los reparos de Contraloría precipitaron su renuncia.

Uno de los análisis que primaron fue que no se podía replicar lo ocurrido tras los cuestionamientos que Pereira enfrentó en el verano sobre eventuales conflictos de interés en la condonación a Johnson's. Aunque en un primer informe de marzo Contraloría no formuló cargos contra el entonces director y sí a otros funcionarios, la indefinición de La Moneda sobre la permanencia de Pereira durante esos meses había paralizado la agenda del gobierno.

A esto se suma que ya en febrero pasado, el propio Presidente Piñera había manifestado algunas aprensiones con la actuación de Pereira, al señalar en una entrevista a La Tercera que "no me gustó no haber sido consultado" sobre la condonación.

Apenas conocida la renuncia del funcionario, La Moneda comunicó que el Presidente aceptaba su dimisión con el objeto de que enfrente los cuestionamientos de la Contraloría. El ministrerio de Hacienda comunicó posteriormente que el subdirector de fiscalización del SII, Alejandro Burr, asumirá como director suplente.