Si la vida fuera como un videoclip de Mötley Crüe, el planeta -o al menos el rock norteamericano- habría tenido otro destino. Como un contrapunto absoluto del flagelo grunge que dominó los 90, el cuarteto formado en Los Angeles, en 1981, estableció un registro visual marcado por los excesos, los centímetros de piel tatuada, las motos y las chicas en striptease permanente.

Pero reducir a Mötley Crüe a los clichés del glam rock ochentero, a esa generación que también agrupa a Poison y Guns N' Roses, resulta estrecho: con una fuerte base rítmica, una voz distintiva y una evidente vocación melódica para parir canciones rudas, el conjunto impuso uno de los sellos más distintivos de la música de los 80. El mismo legado que han intentado empujar hasta el nuevo siglo y que ya fijó su debut en Chile: según confirma la productora Bizarro -la misma tras las visitas de otros insignes del género como Europe y Stryper-, la formación original e histórica de la banda se presentará el próximo 15 de abril, en el Movistar Arena, junto a sus coterráneos, el grupo de nu metal Papa Roach. Un festín de decibeles voluptuosos justo en el período en que también desembarcarán Ozzy Osbourne, Motörhead e Iron Maiden.

Pero lo de Mötley Crue es igual de estelar: la agrupación viene con el vocalista Vince Neil, el bajista Nikki Sixx, el guitarrista Mick Mars y el baterista Tommy Lee, famoso por sus mediáticas polémicas y por su relación con Pamela Anderson. Todos ellos fueron parte del período más glorioso del conjunto, encarnado en hits como Girls, Girls, Girls o Dr. Feelgood.

Un contingente que se comenzó a desmembrar en los 90 y que, luego de años de carreras solistas fallidas, escándalos con drogas y protagonismo en los medios hollywoodenses, se volvió a reunir en febrero de 2005, con un tour que empezó en Puerto Rico. La reverencia de jóvenes que nunca antes los habían visto fue inmediata y hasta se atrevieron con un nuevo trabajo, Saint of Los Angeles (2008). Por esos mismos días también levantaron su propio festival, el Crüe Fest, donde congregaban a los nuevos créditos del rock estadounidense. Entre ellos, Papa Roach, los hombres del hit Last resort que los secundarán en todo su recorrido por Sudamérica.

Las entradas para su concierto en Chile salen a la venta la próxima semana, a través del sistema Puntoticket.