Los ocho restaurantes que en diciembre de 2011 se sumaron a la oferta gastronómica de Plaza Ñuñoa han tenido buena acogida en el barrio. Se trata de Baradiaran, Baires, Open Box, Tapas y Birra, La greda, La casa en el aire, Amaranta y Sand Bar, ubicados en el bulevar construido bajo la plaza.

Jueves, viernes y sábado, desde las 22 horas, este recinto está atiborrado de público y en ocasiones los 305 estacionamientos subterráneos contiguos no dan abasto.

Maximiliano Rodríguez, socio del restaurante de comida peruana Barandiaran, explica que las claves para el éxito están en la apuesta que hizo la comuna por traer locales modernos, bien decorados y con productos de calidad.

"Tener los estacionamientos al lado, conectados directamente con el bulevar, es un plus que entrega tranquilidad y comodidad a nuestros clientes", explica.

Con estacionamientos

Pese a que la inversión en diseño e infraestructura es cercana a los $ 100 millones, los satisfechos dueños de los locales muestran balances positivos.

Maximiliano Rodríguez comenta que se han superado con creces sus expectativas y que se ha vendido cerca de un 30% más que lo proyectado para este periodo.

"Nos ha ido tan bien que en una apuesta bastante arriesgada compramos otro local, acá mismo en el bulevar, que tendrá un concepto totalmente distinto. Se trata de Sand Bar, un local que ofrecerá sandwiches gourmet y seis grandes pantallas donde se exhibirán partidos de fútbol y conciertos", sostiene Rodríguez.

Andrés Astorga, el joven dueño de Tapas y Birra, local enfocado a la comida mediterránea, también explica que el bulevar ha sido todo un éxito. "Los fines de semana los locales están llenos, y eso nos ha impresionado", cuenta.

Estos restaurantes sumaron 500 sillas a las 2.300 que ya existían en este barrio gastronómico. Sin embargo, los estacionamientos no aumentaron de la misma forma.

Según el gerente del Centro Gastronómico y Turístico de Plaza Ñuñoa, CGT, Hugo Córdova, actualmente existe un déficit de aparcaderos en el sector.

Este organismo trabaja en un protocolo de acuerdo con el municipio y los vecinos para disminuir el área de restricción de estacionamientos de las calles aledañas a la plaza. Actualmente es de tres cuadras.

Además, se planea formar el Club Ñuñoa y otorgar beneficios a los vecinos y fomentar el uso del radiotaxi.

El bulevar nació junto a la construcción de los 305 estacionamientos subterráneos inaugurados en septiembre de 2011, bajo la plaza 19 de Abril, ubicada en la parte trasera del municipio y donde se levantó el patio de comidas.

Los estacionamientos tienen un valor de $ 700 la media hora y son uno de los más caros de Santiago. Así, es probable que el estacionamiento sea más costoso que la propia cuenta del restaurante.