Una prueba realizada en EE.UU. a 67 pacientes no fumadores con síntomas iniciales de problemas cognitivos, arrojó interesantes resultados sobre el uso del compuesto orgánico de los cigarros. Aplicando parches diarios de 15 ml de nicotina a la mitad de los pacientes durante seis meses, se evidenció que el 46% mejoró su memoria. Esto, a diferencia de la otra mitad, que empeoró su condición en un 26%, en pruebas de reacción con estímulos visuales y memorización de frases.