El partido que hoy se vivirá en el estadio CAP tendrá un condimento especial. No por ver a Universidad de Chile, actual campeón del Apertura 2014, tratando de ganar como sea para escapar del fondo de la tabla, ni menos por presenciar el glorioso presente de Universidad de Concepción, que pelea en lo más alto del Torneo de Clausura 2015.

Lo especial se vivirá, desde el primer minuto, en torno a Ronald Fuentes. El actual técnico de Universidad de Concepción acaparará todas las miradas por enfrentar a la U, equipo donde se consagró como jugador y comenzó a desarrollarse como DT.

Su nombre está marcado con letras doradas en la historia azul. Sus títulos en la escuadra estudiantil son su mejor cartel para ser considerado como un histórico. No cualquier jugador tiene en su currículum cuatro torneos locales y dos Copa Chile.

El duelo, sin embargo, está lejos de inquietar a Fuentes. Como toda su carrera en el fútbol, prefiere mantener el bajo perfil. Asegura que medirse ante su ex equipo no tiene mayor importancia y que sólo le interesa quedarse con las unidades.

"Es un partido importante, por la categoría del rival, pero para nada especial. Me preocupa más que mi equipo vuelva al nivel de las primeras fechas y que la caída ante Unión La Calera sea recordada como un paso en falso", comienza diciendo.

Pese a su indiferencia por enfrentar a la camiseta defendió durante ocho años, no puede ocultar que su paso por el equipo que viste de azul terminó definiendo su vida. Quizás en la U no logró amarrar un millonario contrato en el extranjero que le permitiese asegurar su futuro, pero sí pudo descifrar la actividad que realizaría una vez retirado del fútbol, que se concretó durante la temporada 2001, luego de sufrir una lesión a la rodilla.

"Tenía problemas en una rodilla y eso terminó gatillando su retiro. Siempre estaba encargando a Estados Unidos algunas inyecciones y medicamentos. Fue una lástima que no siguiese jugando", recuerda César Vaccia, quien lo dirigió al momento de colgar los botines.

Una vez consumada su renuncia al fútbol, el mundialista no quería saber nada más con el balón. "Cuando me retiré, nunca pensé en ser técnico. Quería hacer otras cosas y no me veía sentado en una banca", revela.

El deseo inicial de Fuentes estaba lejos de cumplirse. René Orozco, presidente de Universidad de Chile en 2001, lo convenció para que siguiese ligado al fútbol, asumiendo labores en las series menores del club.

"Al doctor Orozco le debo mucho. Él creía que mis ocho años de experiencia en la U podían ayudar en la formación de los jugadores jóvenes del club. Se presentó la opción de asumir el desafío y lo tomé. Me retiré un 31 de junio y ya el 3 de julio estaba dirigiendo. Desde ahí me picó el bichito de ser técnico y no paré nunca más", dice entre risas.

El estilo Fuentes

La dinámica que ha exhibido Universidad de Concepción en el Clausura 2015 lo tiene peleando en la parte alta del certamen. Para Mariano Puyol, quien estaba a cargo de la Sub 20 azul cuando Fuentes comenzó en las inferiores del club, el equipo del ex defensor destacan por el buen fútbol, condición que el defensor central ya exhibía como jugador.

"Los equipos de Ronald son similares al estilo de juego que él tenía como futbolista. Juegan bien al fútbol y no se complican al momento de salir saliendo", recuerda el histórico jugador de la U.

De paso, agrega que el actual técnico del Campanil realizaba ayudantías en la Sub 20 del equipo azul, cuando apenas había asumido la Sub 14. "Hay técnicos de Primera División que nunca han estado en cadetes. Ronald Fuentes pasó por todas esas etapas en la U y lo hizo muy bien. Ayudó a formar jugadores como Nicolás Canales, Manuel Iturra, Miguel Pinto, Emilio Hernández, entre otros".

Otro que alaba el equipo del ex defensor es César Vaccia, DT bicampeón con los estudiantiles.

"Nunca se apuró e hizo todos los pasos antes de llegar a Primera. Fue un gran jugador y, por lo que se ha visto, tiene toda la capacidad para transmitir sus conocimientos. Tiene todo para seguir triunfando como entrenador", revela.

Así, Fuentes se prepara para enfrentar al equipo que lo marcó como jugador profesional y, también, lo ayudó a encontrar su vocación como entrenador de la actividad que más ama: el fútbol.