Uno de los grandes méritos hechos por la red social de Twitter, y que explican en gran medida su popularidad en estos días, es haber creado una red social que utiliza los conceptos básicos de los SMS de los celulares: desde un límite acotado de caracteres hasta su naturaleza instantánea. Sólo les bastó agregar el factor de masividad para lograr convertirse en el fenómeno web del 2009.
Y es quizás por eso mismo que el mercado móvil sea tan importante para el crecimiento de esta red. Actualmente, cerca del 40% de los twitteros accede a través de plataformas móviles, superando en proporción a Facebook. Así se explica que sus propios creadores hayan escogido este medio para lanzar su primer proyecto propio: un aparato móvil diseñado para "twittear".
Para ello, se acercaron a la compañía Peek Inc., creadora en el 2008 del Peek, un móvil de bajo costo capaz de enviar y recibir correos electrónicos y que fue considerado "el gadget del año" por revistas como Wired. La idea era crear una experiencia similar, pero basada en Twitter. Así nació el Twitter Peek, un producto que esta semana ya está disponible en Estados Unidos y cuya aparición no ha sido indiferente para críticos y analistas.
Conexión permanente
La conexión a Twitter desde un móvil no es novedad. Prácticamente todos los smartphones poseen clientes propios de la aplicación e, incluso, celulares modestos sólo requieren un navegador para entrar a la versión móvil.
Pero el Twitter Peek está pensado, según su creador, Amol Sarva, para el público que no puede costearse un smartphone y que tampoco quiere seguir escribiendo con un teclado numérico. Posee 109 gramos de peso, 10 centímetros de alto y se conecta a la red mediante un servicio exclusivo de la compañía a través de la red celular, la cual se mantiene conectada las 24 horas del día. Los usuarios pueden optar por el modelo de 99 dólares -con seis meses de servicio gratis- o el de 199 dólares, que proporciona conexión ilimitada, sin suscripción y para siempre.
La mayor crítica que ha golpeado al nuevo equipo es que, en estricto rigor, eso es lo único que sabe hacer. No hay forma de hacer llamadas, mandar correos o mensajes de texto -salvo los que se permiten enviar en Twitter- ni tampoco poder subir imágenes o ver enlaces a páginas web, lo que sí se puede hacer a través de otros servicios móviles. Para Twitter Peek, en cambio, esta limitación puede convertirse en un punto a favor, considerando que así se reduce la posibilidad de que se acceda a contenido inapropiado o a sitios de phishing.
Por lo mismo, ambas compañías apuestan a que durante esta temporada navideña el producto se convierta en un éxito. Al menos es lo que los dueñós del sitio esperan para poder cumplir dos de sus principales objetivos: llegar a los 25 millones de usuarios registrados a final de año y lograr demostrar, por primera vez, el potencial financiero de la página, que si bien ha recaudado más de 155 millones de dólares en inversiones, aún no ha podido generar ganancias para los que han invertido dinero para el sitio.