Colo Colo tuvo un regreso triste a los entrenamientos. La eliminación de la Copa Libertadores, otra vez en la fase de grupos, caló hondo en el camarín. Y el fracaso se notó en la práctica de ayer, en el Monumental, porque las caras largas abundaban.
El Cacique, a puertas cerradas y a ratos bajo la lluvia, trató de sacarse de alguna forma la amargura de no haberle podido ganar al humilde Independiente del Valle. El plantel albo prefirió refugiarse en la soledad, por lo que no hubo presencia de los medios ni de los hinchas.
La decepción es total en Pedreros, especialmente, dentro del directorio de Blanco y Negro. En la sociedad anónima esperaban, a lo menos, clasificar a los octavos de final del certamen internacional, expectativa alimentada en gran parte por la presencia de Melgar (Perú) y del conjunto ecuatoriano, dos equipos abordables y de muy poca tradición.
Sin embargo, se quedaron en el camino, tal como viene sucediendo desde 2008. Un hecho que no agradó para nada en la concesionaria. Fue cosa de ver los semblantes con los que abandonaron el recinto de Macul los dos hombres fuertes de la compañía: Aníbal Mosa, el presidente, y Leonidas Vial, el segundo máximo accionista. "Nadie está contento", reconoció, escuetamente, el timonel blanco.
Si bien el empresario puertomontino afirmó que el análisis del semestre se realizará cuando termine el Torneo de Clausura 2016, ya hay varios puntos que los directivos del Cacique tienen muy claros, más allá de lo que pueda pasar en las tras fechas que restan para el final del campeonato local.
Según apuntan en ByN, definitivamente hay jugadores que no están a la altura de Colo Colo. En este grupo destacan Luis Pedro Figueroa, Cristofer Gonzales, Andrés Vilches, Cristian Gutiérrez, Martín Rodríguez y Juan Delgado. Lo más probable que es varios de ellos emigren del club o se vayan a préstamo al término de la temporada. Dependerá del cuerpo técnico de turno.
El caso de los dos elementos provenientes de Huachipato ha sido frustrante en el Monumental, considerando que en conjunto, por ambos, se invirtió más de US$ 1 millón el año pasado. Además, el volante, luego de un inicio prometedor, se fue quedando al punto de que hoy ni siquiera es titular fijo. Mientras que el delantero ha jugado poco y sus constantes lesiones tienen cansada a la directiva.
Asunto aparte son las últimas incorporaciones. El único que se ha salvado en este ítem es Matías Zaldivia, quien el jueves fue el mejor jugador de los albos, algo que viene ratificando hace tiempo. En cambio, su compatriota, el argentino Martín Tonso y, sobre todo, el colombiano Javier Reina, no han respondido como esperaban en el Monumental.
Además, los experimentados tampoco ha estado a su máximo nivel. Así, por ejemplo, Gonzalo Fierro y Julio Barroso no rindieron como en ocasiones anteriores, teniendo su punto más bajo en Belo Horizonte, ante Atlético Mineiro. Ni siquiera Jaime Valdés fue la figura excluyente que suele ser.
El cuerpo técnico es otro de los culpables para ByN, pues de tres partidos en casa sólo venció a Melgar, el más débil, y por la cuenta mínima, una muestra de que no supo sacarle el rendimiento esperado a sus jugadores. Además, a nivel físico el equipo se vio muy agotado en momentos. Mientras que, según la directiva, en la elección de los refuerzos tuvieron tanta responsabilidad como la concesionaria, que igualmente tiene culpa en el fracaso deportivo, al sólo haber invertido US$ 1 millón en contrataciones. "No tenemos los recursos de otros lados", justificó Vial, el jueves, en Pedreros.