No se trata de Petr Korda ganando el Abierto de Australia de tenis en 1998, sobre Marcelo Ríos, sino de su hija golfista, Jessica, quien obtuvo ayer su primer torneo del LPGA, que curiosamente se juega en la misma ciudad, Melbourne, y lleva el mismo nombre, Abierto de Australia. La estadounidense derrotó en desempate a otras cinco jugadoras.