El Presidente saliente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, demostró ayer su total solidaridad con el australiano Julian Assange, fundador de Wikileaks. Más aún, Lula se mostró "espantado ante la falta de manifestaciones" en el mundo contra la prisión de Assange y también ante las críticas a la divulgación de los papeles del Departamento de Estado. "Quiero manifestar mi protesta contra ese atentado a la libertad de expresión", agregó el Presidente brasileño en la que fue la primera muestra de apoyo explícita a Assange de un mandatario.
"En vez de culpar a quien divulgó esos documentos, deberían ser culpados los que los escribieron", afirmó Lula, en la mañana de ayer, en Brasilia, donde pronunció un discurso para hacer un balance de los cuatro años desde la puesta en marcha del Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC). El gobernante, que cederá la presidencia brasileña dentro de 22 días a la presidenta electa, Dilma Rousseff, criticó también a la prensa, por "no haber defendido el derecho de libre expresión" de Assange. "Este muchacho está preso y yo no estoy viendo protesta alguna contra la amenaza a la libertad de expresión", comentó Lula, quien se comprometió a expresar esa defensa en el blog de la presidencia brasileña .
"Aparece ahí Wikileaks, desnuda a una diplomacia que parecía inabordable, la más segura del mundo, y comienza una búsqueda. No sé si hasta colocaron pancartas como en tiempos del lejano oeste de 'Se busca, vivo o muerto", ironizó Lula, quien ha mantenido una relación compleja con los medios de comunicación en sus ocho años de Presidencia. Si en una ocasión se definió como "un producto de la libertad de expresión", en otras acusó a los medios de "silenciar las cosas buenas que hace el gobierno".
Luego, durante la tarde, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, también defendió a Assange. "Si hay democracia, entonces que sea absoluta. ¿Para qué han encerrado al señor Assange en la cárcel?, ¿Esto qué es, democracia?" señaló Putin ante un grupo de periodistas rusos. El premier también criticó a EE.UU., por "intentar enseñar al mundo las reglas de la libertad".
Assange se encuentra bajo custodia judicial en una cárcel de Londres, a la espera de que un tribunal decida si lo extradita a Suecia, donde es requerido por presuntos delitos sexuales.