Apoyada nada menos que por Johnny Depp (Piratas del Caribe) y Christian Bale (Batman), la francesa Marion Cotillard (33) está dando su gran salto a Hollywood en un año cardado de proyectos de alto perfil, luego de alzarse con el Oscar a Mejor Actriz en 2008 por su rol de Edith Piaf en La vie en rose.
Este mes la artista comparte con los dos consolidados galanes en Enemigos públicos, película que narra la historia de la persecución del asaltante de bancos John Dillinger (Depp) por parte de un agente del FBI (Bale) en los años de la Gran Depresión en EE.UU. Aquí la estrella gala interpreta a una mujer de herencia francesa e indígena conectada con el legendario ladrón. "Nuestros personajes tienen mucho en común, más que nada por la falta de confianza en la autoridad", explica. Luego añade sobre la conexión de ambos roles: "Ella se siente atraída por el tipo de libertad que Dillinger representa, pese a que puede ser una libertad falsa, ya que sabes que no va a durar. Es acerca de vivir el momento".