Un chequeo de rutina terminó en un infortunio mayor para Mark González. El volante viajó a Dallas, Estados Unidos, para ser revisado por el médico que lo operó de la cadera el 17 de mayo, pero las noticias que recibió no fueron buenas, pues deberá ser intervenido nuevamente.

El jugador del CSKA Moscú suma más de seis meses sin jugar debido a un problema en la articulación, que le impidió, entre otras cosas, ser considerado para la Copa América.

"Fue por un chequeo normal, pero salió algo inesperado. Es un problema con la operación antigua, que hay que volver a tratar. Ahora será una operación correctiva", reconoció el representante del ex seleccionado, Cristián Ogalde.

En los primeros días de octubre el futbolista surgido en Universidad Católica entrará a pabellón nuevamente, en la clínica Steadman, en Dallas. Y será operado por el mismo médico de la vez anterior, Marc Philippon.

Luego de la intervención inicial, González realizó el período de recuperación en las instalaciones de la "U", en La Cisterna, con terapia a cargo del kinesiólogo de los azules, Mauricio Hernández.

"Mark estuvo con nosotros hasta el 12 de agosto. Estaba bastante bien. Si bien aún mantenía un poco de dolor, nunca pensé que iba a tener que volver a pabellón", reconoce el profesional.

El tiempo que tendrá de recuperación aún es una incógnita. "Lo sabremos después de que lo intervengan. Lo importante es que Mark se recupere completamente", agregó el agente del futbolista.

Obviamente, el estado de ánimo del jugador no es de los mejores. "Mark está tranquilo, porque sabe que es algo que hay que hacer. Pero está incómodo por la situación. Esperaba volver a jugar pronto y no poder hacerlo es bastante duro. Ojalá que no pase mucho tiempo", añadió Ogalde.