Uno de cada dos temblores que han ocurrido en el país este año se ha presentado en tres regiones del país: Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta. Es el registro que posee el Servicio de Sismología de la U. de Chile, institución que monitorea estos eventos a nivel nacional.

Según el organismo, se han producido 688 sismos perceptibles (mayores a 3 grados en la escala de Richter) en el Norte Grande, lo que equivale al 54% del total nacional, entre el 1 de enero y el 19 de junio de este año. La situación contrasta con la realidad que existe entre las regiones de Atacama y Coquimbo, donde los movimientos telúricos llegan a 230 en lo que va de 2013. En el área central del país (regiones de Valparaíso y O'Higgins), las cifras indican que se alcanza los 249 temblores. Sin embargo, en el área sur (sector donde ocurrió el terremoto de febrero de 2010) se llega sólo a 67 sismos este año (ver infografía).

El director del Servicio de Sismología de la Universidad de Chile, Sergio Barrientos, explica que el norte "tiene una productividad mayor que el resto del país, en general". Agrega que los temblores más comunes en esa área son los que se dan a mayor profundidad (entre 80 y 100 kilómetros al interior de la tierra). "En ese sector ocurren condiciones de temperatura y presión únicas que afectan el interior de la placa de Nazca (oceánica) y eso activa fallas preexistentes y se producen los temblores". Barrientos dice que estas condiciones producen cambios de tensión, que provocan los sismos. ¿Tienen que ver estos movimientos con el gran terremoto que se espera en el norte? Asegura que no son fenómenos relacionados, sino que las condiciones geográficas y la antigüedad de la placa ubicada en el océano, llevan al escenario actual.

El director señala que el último gran terremoto en el norte ocurrió en 1877 y fue cercano a los 8.8 grados(no hay registro instrumental exacto), por lo que la comunidad científica ha sostenido que se espera la ocurrencia de un sismo de alta magnitud. Esto, debido a que con los años se ha acumulado energía por la presión que se ha desarrollado entre las placas.

Prevención

El subdirector de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Fredy Rivas, explica que "no nos centramos en una zona por sobre otra cuando realizamos nuestras coordinaciones. Vivimos en un país sísmico, por lo que sabemos que va a temblar, pero no dónde". Por ello, dice que se están realizando simulacros en macrozonas, como el que se efectuará el 8 de agosto próximo en la costa entre Arica y Antofagasta, donde las personas se autoevacuan sobre la cota 30.

Para Gabriel Quezada, director (s) de la Onemi de la II Región, debido a la formación del suelo (rocosa), la población tiende a no percibir los movimientos telúricos, "lo que genera una falsa imagen de calma". Por ello, plantea que se han efectuado simulacros en áreas costeras, ya tienen implementadas 41 sirenas y mejoraron las comunicaciones para alertar de posibles eventos.