Su salto a la fama fue a fines de los años 90 con el papel de Henry Parker, un inocente quinceañero que rompió varios corazones entre las seguidoras de Dawson's creek. Su elogiado desempeño en la popular serie juvenil, sumado a su cara de niño bueno -que le valió comparaciones con Leonardo DiCaprio-, auguraba un esplendoroso futuro en pantalla para Michael Pitt (30), aunque, desde entonces, el actor ha optado por papeles de tipos marginales que poco recuerdan al bueno de Parker, principalmente junto a directores alejados de los cánones de la industria.

"Suelo escoger los proyectos en función de con quién vaya a trabajar. Me resulta muy difícil rodar con gente que no me gusta", comentaba el actor a El País hace dos años, justo antes de fichar en la serie Boardwalk empire, el proyecto producido por Martin Scorsese que lo llevaría de vuelta a la TV y lo convertiría nuevamente en un rostro reconocible para la gran audiencia.

En el drama de HBO, que retrata las diversas caras de Atlantic City durante los años 20, Pitt interpreta a Jimmy Darmody, un taciturno joven marcado por la ausencia de su madre y sus vivencias en la guerra. Una imagen que no dista mucho de ese aire atormentado que suele mostrar el actor.

En la segunda temporada de la serie, que HBO estrena esta noche en Latinoamérica (a las 20 horas), el personaje de Pitt retomará el antagonismo que ya se vislumbrara al final del primer ciclo, mordiendo la mano de "Nucky" Thompson (Steve Buscemi), el corrupto político que controla la ciudad y que lo transformó en su "protegido" desde niño. "Jimmy protagonizará un gran arco dramático, desde donde empieza hasta donde terminará", adelantó Pitt al sitio oficial de HBO, sobre el destino de su rol en el segundo ciclo de la serie. Chico malo

La fama de "rebelde" que acompaña a Pitt no sólo se ha construido en base a su reticencia a las entrevistas y su turbio historial familiar, sino también por los papeles que ha interpretado en la última década. En 2001 encarnó a un adolescente adicto a las drogas en el filme independiente Bully, de Larry Clark (Kids). Le siguió su papel de un ingenuo estadounidense en la sexualizada París del 68, en Los Soñadores (2003), de Bertolucci; el de un psicópata en la versión norteamericana de Funny games (2007), y el de una solitaria estrella de rock -inspirada en Kurt Cobain- en Last days (2005), de Gus Van Sant.

"(Darmody) no se compara a mis trabajos previos. No creo haber tenido nunca antes tanta preparación para realizar un personaje", comentó Pitt al sitio de HBO, donde aclaró que "cuando interpreto al personaje estoy dando todo de mí, pero como personas no somos muy parecidos".

En paralelo a su carrera como actor, Pitt ha desarrollado su faceta de músico a través del grupo Pagoda, que formó en 2001, en Brooklyn. La banda desde un principio se movió en el ambiente underground, hasta que en 2005, durante el rodaje de Last days, Pitt conoció a Thurston Moore, el líder de Sonic Youth, quien apadrinó al conjunto en sus primeros días de actividad.