El ex canciller alemán Helmut Schmidt (1974-1982), que impulsó de forma decisiva la integración europea, murió ayer a los 96 años en Hamburgo, evocado por líderes políticos de distintas orientaciones como un europeísta pragmático y alejado de dogmas ideológicos, consignó EFE. Fueron los médicos que le atendían en casa quienes informaron de su muerte, esperada tras conocerse que su delicado estado de salud. La canciller Angela Merkel definió a Schmidt como un precursor de la cooperación internacional y destacó su papel en la creación del sistema monetario europeo.