Su muerte, al igual que buena parte de sus actuaciones más controvertidas, está marcada por la sospecha y la duda. El controvertido Lino César Oviedo, general retirado, ex jefe del Ejército paraguayo y candidato presidencial para las elecciones del 21 de abril, falleció la noche del sábado, después que el helicóptero en el que viajaba, tras un acto político en el norte de Paraguay, cayera y se incendiara. Su cuerpo, el de su guardaespaldas y el del piloto fueron encontrados ayer calcinados, en las proximidades de la aeronave siniestrada, en el departamento de Presidente Hayes. Oviedo viajaba desde la ciudad de Concepción, a 500 km al norte de Asunción, hacia la capital.
El conocimiento de su muerte se produjo en una fecha emblemática para Paraguay y para el propio Oviedo, ya que fue un 3 de febrero, pero en 1989, cuando el militar se presentó ante el entonces dictador, Alfredo Stroessner, conminándolo a ceder el poder, tras 34 años de un régimen de mano dura.
No se conocen las causas de la caída del aparato. La primera hipótesis que se manejaba era que las condiciones climáticas no eran propicias para que el aparato volara. La diputada Fabiola Oviedo, hija del líder político fallecido, afirmó que, según las primeras informaciones que recibió cuando desapareció la aeronave, la causa pudo haber sido una tormenta. Sin embargo, otros dirigentes del partido de Oviedo, la Unión Nacional de Ciudadanos Eticos (Unace), denunciaron un "crimen político" y "un mensaje de la mafia". "Es muy llamativo" que ocurra en esta fecha, 3 de febrero, dijo el vocero de la Unace, César Durant. Un familiar de uno de los acompañantes de Oviedo dijo que se sospecha que el helicóptero -un Robinson 44, rojo- haya sido blanco de disparos.
El gobierno de Paraguay, en tanto, anunció que llamará a expertos internacionales para esclarecer el hecho y declaró tres días de duelo por la muerte de Oviedo. "Vamos a llamar a expertos internacionales. La idea es transparentar todo sobre cómo sucedió todo", afirmó el director de Aeronáutica Civil de Paraguay, Carlos Fugarazzo. "Todas las hipótesis son válidas hasta el momento. No se descarta ninguna posibilidad", subrayó.
Lino César Oviedo, de orígenes campesinos, siendo coronel fue el hombre que exigió personalmente la rendición de Alfredo Stroessner, en 1989, por encargo del general Andrés Rodríguez. Por ese hecho fue ascendido a general de brigada. En 1993 llegó a jefe del Ejército, pero en 1996 el entonces Presidente, Juan Carlos Wasmosy (1993-1998), lo pasó a retiro acusándolo de haber intentado dar un golpe en su contra. Estuvo 55 días en prisión. En 1997 fue elegido candidato a presidente por el gobernante Partido Colorado, para las elecciones de 1998. Wasmosy desempolvó las acusaciones golpistas contra Oviedo. Fue arrestado y en marzo de 1998, una corte marcial lo condenó a 10 años de cárcel y ordenó su "baja absoluta" del Ejército.
La elección de 1998 fue ganada por Raúl Cubas, ahijado político de Oviedo, quien poco después indultó y restituyó los derechos cívicos y políticos del ex general. En marzo de 1999 fue asesinado el entonces vicepresidente paraguayo, Luis María Argaña, líder de una vertiente contraria a Cubas. Ese hecho desató una crisis política que llevó a la salida del gobierno de Cubas. Oviedo fue acusado por familiares de Argaña de ser el instigador del crimen. El ex militar, quien permanecía prófugo ya que la justicia paraguaya había rechazado el indulto de Cubas, huyó a Argentina y después a Brasil. Allí permaneció clandestino y luego pidió asilo político, en el mismo país donde vivió refugiado hasta su muerte Stroessner.
En 2004, Oviedo resolvió ponerse a disposición de los jueces paraguayos y regresó al país. Tras un paso por la cárcel, la Corte Suprema lo exoneró de los cargos de golpismo, lo que le permitió ser candidato presidencial, en 2008. De todas formas, a él le gustaba calificarse como "golpista democrático". Sólo logró el tercer lugar, pero su actuación dividió el voto colorado, lo que permitió el triunfo de Fernando Lugo y poner fin a más de cinco décadas de gobierno del Partido Colorado.
En los comicios presidenciales de abril, el político fallecido debía enfrentar a Horacio Cartes, del Partido Colorado, y Efraín Alegre, del Partido Liberal (azul), además de otros nueve candidatos.