A través de antecedentes entregados por testigos empadronados en las cercanías del sector de Las Mercedes, VI Región, Carabineros pudo dar con el paradero del niño de 11 años que es sindicado como la persona que desde un paso sobre nivel lanzó una piedra en contra del automóvil donde viajaba Andrea Urrejola (43) en el kilómetro 97,5 de la Ruta 5 Sur. Producto del impacto la periodista falleció horas después en el Clínica Integral de Rancagua.
El hecho ocurrió el pasado viernes y tras una exhaustiva búsqueda realizada por funcionarios policiales y un empadronamiento del sector aledaño al ataque, se pudo dar con el paradero del menor identificado con las iniciales E.A.M.C.
Según el capitán Mario Recabarren, las declaraciones de cuatro testigos presenciales fueron vitales, ya que observaron al menor en el paso sobre nivel a las 21.30 -hora en que ocurrió el hecho, y con la piedra que impactó en el asiento del copiloto de la camioneta Nissan. A esto, según Recabarren, se suma el testimonio de una menor que: "dice que su amigo le dijo que lo había hecho".
Defensa de la familia
Debido a que es inimputable, el menor fue derivado ayer al Tribunal de Familia de Rengo, donde acudió acompañado por su madre. Luego de prestar declaración, el niño quedó en libertad pero con prohibición de acercarse al paso sobre nivel. También se encargó al Sename estudiar su situación social con la finalidad de evaluar alguna medida de protección y determinar si puede vivir con su familia o tiene que ser derivado a un hogar de menores.
"Nosotros reunimos una serie de antecedentes que teníamos que pasar al tribunal de familia. La verdad es que los antecedentes son categóricos", dijo el fiscal Servando Pérez.
El niño que cursa quinto básico reside en una mediagua en la población de Las Mercedes, a metros del lugar del mortal apedreo. Según los vecinos de la zona, el menor siempre era visto jugando con piedras.
"Al niño le gustaba andar tirando piedras, yo varias veces lo reté por lo mismo", contó Víctor Lorca.
Además, agregó que la familia ya no reside en el domicilio, el que dejaron el sábado por la mañana, para trasladarse a Rancagua.
La hermana del niño dijo que al menor le dicen" El Veneno", apodo que le pusieron algunos vecinos.
La joven ayer defendió a su hermano y descartó la participación en el apedreo que ocasionó la muerte. "Mal, mal no se portaba. Es lo normal, pienso yo. Un niño con sus travesuras. El no fue", explicó.
Lo mismo dijo la madre del menor. La mujer sostuvo que su hijo no lanzó la piedra y que cooperará con la indagatoria. "Como familia estamos completamente destruidos. Yo en la mañana estuve con él. El lo que más pide es que encuentren a estas personas; los encuentren para que a él lo dejen tranquilo".
Sostuvo que el día de la pedrada el menor la habría acompañado a visitar su nuevo hogar en Rancagua.
Uno de los primeros ataques a pedradas en una carretera ocurrió en julio de 2002, cuando Gladys Valck recibió un piedrazo en la cabeza mientras iba con su vehículo por la Autopista Central. Se determinó que la piedra fue lanzada desde una pasarela por una mujer con sicosis. La concesionaria fue condenada a pagar $ 87 millones a su familia por no tener las medidas de seguridad.