Más que su número de ventas o la cantidad de juegos alabados por la crítica, el gran mérito que ha logrado Nintendo con su consola Wii es el haber logrado integrar a toda la familia en torno a los videojuegos.

Pese a los sacrificios que ha tenido que hacer para lograrlo, como no tener gráficas de alta resolución o un procesador potente, el enfoque en crear juegos más sencillos y con controles más intuitivos finalmente logró que el sistema se masificara, convirtiéndose casi en un fenómeno cultural.

Un fenómeno que su creador Shigeru Miyamoto -padre de Super Mario- ha tenido que ir balanceando entre los gamers más fieles y las nuevas generaciones. Así, mientras el mes pasado les tocó a los primeros con Super Mario Galaxy 2, el nuevo título desarrollado por la empresa va pensado directamente para los llamados jugadores casuales, que buscan actividades en común con sus amigos o familia.

Tableros digitales

Wii Party es el séptimo de la línea que ha desarrollado Nintendo para su consola Wii con una premisa similar: todos constan de una colección de pequeños juegos que no duran más de 15 minutos, altamente competitivos y basados en movimientos o controles sencillos.

Cada uno siempre tiene una temática: deportes, música, ejercicio, y en este caso, el tema es hacer una fiesta. Es decir, estará totalmente basado en actividades con las que puede organizarse un cumpleaños, una visita familiar o una noche en familia.

El juego contará con la mayor cantidad de actividades incluidas en un juego de este tipo -80-, las que se dividen en tres grandes grupos: un modo standard, donde hasta cuatro jugadores podrán competir en juegos como el bingo, la ruleta, dados o el ludo, además de otros diseñados para competir.

El segundo grupo contiene a los llamados juegos en pareja, donde como su nombre lo indica, se requieren de dos jugadores, tanto para competir como para colaborar, con tests de compatibilidad o pruebas de equilibro que utilizan la balanza del Wii. Y el tercero es llamado "Living Party", el que fue diseñado para sacar los juegos fuera de la pantalla, utilizando las características particulares del control de Wii, como el acelerómetro y el parlante incorporado.

Por ejemplo, será posible jugar a la escondida, donde un jugador deberá colocar el control en algún lugar de la casa mientras el resto lo busca guiado sólo por el sonido que sale del mando. Otro juego obliga a los jugadores a pasarse el control como si fuera una bomba, eliminando al que le tiemble más la mano. Como los juegos de antes, pero con las herramientas de hoy.