A principios de enero, un nuevo espacio se sumará a la larga historia de los realities en la televisión chilena: Mundos opuestos, espacio de Canal 13 donde los participantes enfrentarán dos realidades totalmente opuestas, en el futuro y el pasado, en el medio de una gran estructura, de 30 metros de diámetro y dividida por un muro de cristal, en la localidad de Pirque. Sergio Nakasone, productor ejecutivo del proyecto, explica que "definimos que es un reality de alto contraste, donde el futuro va a ser sumamente confortable, tecnológico, con una sensación todo el rato en relación al placer, las vacaciones; y el pasado va a ser todo lo opuesto, va a ser riguroso, incómodo, rústico. Esos son los dos mundos que se oponen". Pero donde, además, existirá el presente, el lugar en que los concursantes de ambos mundos podrán cruzarse, agrega el ejecutivo sobre el espacio que será conducido por Sergio Lagos.
Entre los detalles del programa, afirma Nakasone, se cuenta que "en el pasado -ambientado en el año 100 d.C.- no sólo van a tener que buscar, sino que almacenar sus alimentos de alguna forma no tecnológica. Mientras en el futuro van a tener una heladera ultratecnológica que siempre va a estar llena, y en el pasado van a tener que aprender a almacenar verduras y la carne". Para lograr la sensación de estar en el futuro la producción está buscando tecnología de punta para ambientar el set, que estará ubicado en Pirque, aunque no es la misma casona donde se realizaron otros espacios, como La granja y 1910. Esta vez, es un centro de eventos donde se montará una estructura tipo carpa. "Por primera vez vamos a construir una locación de cero", asegura su productor.
Si bien los participantes entrarán a fines de mes al encierro, aún no finaliza la convocatoria al casting masivo que, en esta oportunidad, sobrepasó todas las expectativas. "Llevamos 35 mil inscritos, cuando el promedio de realities anteriores era de 13 mil", cuenta Nakasone, detallando que serán entre 18 y 22 los participantes, mitad desconocidos y mitad famosos, divididos en el mismo número de hombres y mujeres. El ejecutivo recalca que en esta ocasión se inscribieron jóvenes de Argentina y Perú: "Ellos incluso estaban dispuestos a costear su viaje, lo que habla de que Chile se convirtió en un foco importante de lo que es televisión".
Mientras, en el aspecto más técnico, Mirko Morán, director del proyecto, explica que tendrán 25 cámaras robóticas, siete portátiles y un switch para seguir durante las 24 horas los movimientos de los participantes, que, como es habitual, tendrán que someterse a pruebas físicas: "Mezclarán habilidad, fuerza y equilibrio", dice Morán. Además, al equipo se sumó Juan Pablo Planas, ex productor general del Festival de Viña del Mar. "Para montar toda la estructura de este reality es importante tener la experiencia de alguien como él", señala Nakasone.
El reality en la mira
Mundos opuestos viene a estrenarse poco después de que la vigencia del reality se viera cuestionada por el fracaso de El experimento, de TVN, que debió ser cancelado por no superar los nueve puntos de sintonía promedio. Sin embargo, para Nakasone, Canal 13 ha dado muestras de solidez en esta área. "Un mal programa no creo que sepulte al género, es lamentable lo que le pasó al El experimento, pero es ver el vaso medio vacío. Si uno ve lo que le pasó al 13, es todo lo contrario. Es cosa de ver los resultados de Perla, En su propia trampa, la telerrealidad como género es la columna vertebral del canal, es el soporte de los productos mas fuertes, como Los 80 y Mi nombre es", analiza el ejecutivo, agregando que "mientras los programas tengan novedad, una buena historia para contar, buenos personajes, el género va a estar vivo".