Cuando muchos británicos terminaban el fin de semana con los festejos por la boda real entre el príncipe Guillermo y Kate Middleton, los duques de Cambridge anunciaron que aplazarán su luna de miel, eligiendo en su lugar pasar un tiempo de descanso en un lugar desconocido en Reino Unido. Según señaló ayer el periódico The Sunday Telegraph, la postergación se debería a temores de seguridad de la pareja.

"El duque y la duquesa de Cambridge han optado por no elegir una luna de miel inmediata", indicó un portavoz del Palacio de St. James, citado por el medio inglés, quien explicó que, tras unos días de descanso, el duque regresará a su trabajo de piloto de búsqueda y rescate de la Royal Air Force (RAF). Asimismo, el portavoz informó que la pareja dejará el viaje de novios para más adelante, aunque sí confirmó que sería en el extranjero.

El anuncio se realizó el sábado a última hora y, según el Telegraph, nada ha tenido que ver el trabajo del duque de Cambridge en la decisión, sino que el motivo estaría en que la pareja quería visitar Jordania -donde Kate vivió durante dos años, cuando era niña- en su viaje de novios. El programa incluía visitas al desierto Wadi Rum y a la antigua ciudad de Petra. Sin embargo, los riesgos potenciales de seguridad, producto de los disturbios en varios países árabes, habrían llevado a Guillermo y Kate a revisar sus planes.

La pareja dejó el Palacio de Buckingham la mañana del sábado, tras una recepción que duró hasta pasadas las 3 de la madrugada del viernes.

Los duques de Cambridge caminaron de la mano por el césped del palacio, para ser recogidos por un helicóptero que los llevaría al destino de su fin de semana secreto.

La prensa local señaló que los recién casados pudieron haber viajado al castillo escocés de Balmoral -tal como lo hicieron el príncipe Carlos y Diana de Gales antes de iniciar su luna de miel-, lugar habitual de descanso de la reina Isabel II y su esposo, el príncipe Felipe. Otro de los posibles lugares donde se podría encontrar la pareja son las islas Scilly, donde Guillermo pasó sus vacaciones en 1989 con sus padres, antes de que ellos se separaran. Allí, ellos podrían hospedarse en las fincas privadas de sus amigos.

Se espera que la pareja real retome su luna de miel dentro de un mes, antes de que comiencen sus compromisos públicos en junio, que incluyen la Marcha de la Cabalgata de color, la celebración del cumpleaños número 90 del duque de Edimburgo y la ceremonia de Gater Day en el castillo de Windsor, que será seguido por una gira de nueve días por Canadá, el 30 de junio.

Sin embargo, la licencia de dos semanas que el príncipe Guillermo utilizará para su luna de miel en el extranjero se haría efectiva antes de su viaje a Canadá, según confirmó el portavoz del príncipe.